Ao Lie

934 115 14
                                    

Espero que les guste~

Nota: Recuerdo que me pidieron alguna vez esto pero en su momento, no pude cumplirlo

Nota-2: No puedo recordar quien me lo pidió xD

Nota-3: Ao Lie me parece un personaje muy adorable pero por alguna razón, no se me ocurren muchas ideas con él T-T

Ao Lie no tiene idea de dónde está o el cómo había llegado allí pero poco le importa, porque esta absolutamente fascinado.

Mei, el primero rostro con el que se encontró, se presentó a si misma como un familiar. Supo que ella no mentía porque podía sentir el dragón de poder puro que se escondía en el interior de ella, uno que parecía removerse constantemente con energía de sobra. Hacia demasiadas preguntas que no podía responder, a tanta velocidad qué se volvía difícil prestarle atención, su agarre firme mientras lo arrastraba fuera de la hermosa casa en la que estaban. Era algo brusca y torpe pero él aun así la amo.

Y la "ciudad", como le dijeron que se llamaba, era impresionante. Todo era tan raro, alto y diferente a todo lo que conocía, aunque eso no quitaba que mucho de lo que veía era brillante y hermoso, un poco demasiado ruidoso y con más gente de lo que estaba acostumbrado pero igual, todo era muy llamativo.

A quien presentaron como Pigsy se veía realmente diferente al demonio cerdo qué conocía, aun brusco y tosco pero más pequeño y sin intenciones asesinas de algún tipo. Parecía feliz de cocinar y compartir lo que hacía, luciendo orgulloso.

Tang también era diferente, más expresivo y nervioso, torpe mientras luchaba para soltar todas las preguntas que se le vinieran a la mente. Parecía demasiado emocionado por su presencia, soltando datos de todo tipo, muy distraído como para darse cuenta que nadie le prestaba atención.

Sandy también era muy diferente, con su sonrisa amable y movimientos cuidadoso, bondadoso a pesar de los grandes músculos que mostraba sin timidez. Parecía encantado de tener a alguien con quien compartir su té, algo que solo aumento cuando empezó a mostrarle las fotos de sus gatos y sus divertidas historias.

Quien se presenta como el sucesor de Wukong es quien más lo sorprende, principalmente porque se ve como un humano completamente normal pero con ese familiar y único bastón en versión más pequeña girando ágilmente entre sus dedos. A pesar de que lucía tan animado e infantil como el mismo Wukong que conocía, había algo más suave y amable en su aura, con cariño genuino brillando en sus ojos.

Así que decide probar su suerte.

-¿Puedo tomar tu mano?- sonrió, amable y esperanzado. Cada vez que le preguntaba a Wukong recibía una mueca y muchas quejas, ruidosas, pero al final, después de un tiempo, siempre terminaba por ceder y tomaba su su mano. Incluso si parecía hacerlo de mala gana, Ao Lie puede sentir su suave agarre, y sabe, incluso sin palabras, que al mono le gusta el gesto tanto como a él.

-¿Tomarse de las manos?- parpadeo, confundido y sorprendido al parecer. -¡Oh, claro!- reaccionó. -Solo déjame...- paso su pequeño bastón con el que estaba jugando a su otra mano y en un gesto nervioso, frotó ligeramente su palma contra su remera. -Aquí- extendió la mano, con una sonrisa animada y Ao Lie no podía estar más encantado, riendo ligeramente y con mucha alegría mientras se apresuraba a tomar la mano ajena. Sus manos quedan escondidas por sus largas y anchas mangas, los dedos del humano están algo fríos y esta seguro que lo que puede sentir son callos por el entrenamiento pero no le importar, porque el agarre es amable y la sonrisa que el chico le dedica es tan sincera que no duda en devolverle el gesto.

~Monkie Kid~ 4️⃣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora