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Hay una ley muy importante de la vida que dice:
No prometas cuando estés feliz, no respondas cuando estés enojado y no decidas cuando estás triste.

Pero yo siempre soy un caso aparte y aun conociendo la ley, la incumplo ¿Soy una antisistema?

En realidad mi cuerpo solamente estaba movido por el impulso. Uno bastante insano para decir verdad. Pero ¿Acaso a ninguno se le ha subido un evulle y hacen algo que quizás antes no se le ocurrió?

- Kook que bueno volverte a ver - Le saludó el dueño del local que habíamos entrado con una sonrisa y un choque de puños - ¿Qué haces por aquí? ¿Quieres un nuevo diseño?

- En realidad, Namjoon, queremos - Hizo hincapié y se movió a un lado para que yo quedará enfrente del muchacho más alto que Kook - Él es Namjoon, Sakura.

Miré al chico que me examinaba con suspicacia y este casi suelta un chillido al escuchar mi nombre.

- ¡¿Sakura?! ¡La chica de la que siempre hablas!

Kooki asintió sonriendo levemente, pasó una mano por mi cabeza como si fuera una cachorro y me acercó al muchacho que había comenzado a boquear como un pez fuera del agua. ¿Qué le diría Kook sobre mí para que esté chico tenga esa reacción? Espero que no sea algo malo.

- ¿Y ya están decididos? - Inquirió nuevamente él que acabo de conocer.

- Totalmente - Contesté súper emocionada - ¿Puede mostrarnos algunos diseños de pareja?

- Por supuesto. Es por aquí.

Kook y yo lo seguimos hasta una esquina donde había varios, para no decir demasiados diseños que colgaban de la pared gracias a la cinta adhesiva.
Mi vista los escaneo y miré a Jungkook con duda.

- ¿Cuál te gusta? - Inquirió el castaño.

- No estoy segura - Volví a escanear todos los dibujos - ¿A ti cuál te gusta?

- Ummh... - Copió mi acción e dirigió su vista a la pared - ¿Y si hacemos uno propio?

- Me gusta mucho esa idea - Aseguré viéndolo desde mi pequeña altura.

- Bien. ¿Nam, podrías traerme papel y lápiz?

El mayor asintió y se marchó para volver rápidamente con lo pedido, le entregó a Kook y luego se volvió a ir diciendo que nos daría tiempo.

Pasado un tiempo el resultado final fue hermoso. Me encantaba ver aquel conejito tatuado en la piel de mi brazo. Era simple y delicado. ¿Cómo le dicen? ¡Ah, sí, tatuaje minimalista! Kook sonreía viendo también el suyo. En su piel se plasmaba un par de copos de nieve. Ambos tatuajes eran únicos y especiales.

Simplemente eran nuestros.

- Quedaron muy bien nuestros tatuajes.

Me encantaba como se escuchaba la palabra "nuestros" salir de la boca de Jungkook cuando se refería a algo únicamente de los dos.

- Me encantan - Afirmé felizmente.

El camino transcurrió con conversaciones tribales. Algunos temas eran musicales y otros sobre películas. Sin embargo, sobre todo hablamos de nuestro "conmemoración". Ambos ansiábamos con vehemencia que llegara este fin de semana y pasar el festival de otoño juntos. Llevábamos tanto tiempo pasando esa festividad juntos que se había convertido en una especie aniversario.
Yo sobre todo tengo un gran anhelo por su llegada. Quería escuchar la canción que Tae me escribió, pero sobre todas las cosas, pasar tempo junto a Jungkook. El pasar tiempo junto a él nunca lo cambiaría. ¡Este sería el día final!

En tres días le confesaré mis sentimientos.

Sé que suena alocado pero ya estaba decidido.
Ni un día más. Ya no perdería más tiempo.

La decisión estaba tomada.

Yo estaba súper decidida. Pero ¿Quién me diría que el tiempo no estaría de mi lado? Que este se había comenzado a consumir brutalmente para mí. Que mis años habían acabado de resumirse a un par de días. Y que realmente este fin de semana se haría el día final de ver a Jungkook.

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Llevaba dos días realmente pasándolo mal. Jungkook no sabía nada porque estaba intentando arreglar las cosas con Minhyun y no había tenido tiempo para venir a verme. Yo tampoco quice asustarlo por gusto. Muy en el fondo quería que él fuera feliz con esa chica. Sin embargo, mi estado no mejoraba con el paso del tiempo. Había perdido peso inexplicablemente, tenía tos continúa, dolores de cabeza y mi hermosa piel porataba una tonalidad grisácea.
Taehyung, quien se había hecho cargo de mí, al ver que mi estado no mejoraba decidió llevarme con un doctor primo suyo. Creo que el nombre del muchacho era Jin, no obstante, en el rectángulo plateado incrustado en su bata de médico decía ‹Doc. Kim›

Ese chico me hizo una gran cantidad de exámenes y por su expresión facial al verificar mis ganglios linfáticos inflados, no parecía nada bueno.

Los resultados hablaron por sí solos...

Un mes de vida. Cáncer de sangre por pincharme un lunar que resulta ser un melanoma... Sí, me había acabado yo misma la existencia cuando me hice ese tatuaje. Y aún así no estaba arrepentida de tener ese conejito en mi piel.

- ¿Estas bromeando, primo? - Inquirió un Tae petrificado completamente.

- Te juro que no. Jamás bromearía con algo como eso, Tae.

La cara del doctor era compasiva completamente mientras me mirada. Pero, ¿qué decir de mí?

La noticia me había helado todos los huesos de mi cuerpo. Me hizo temblar. Retorcer mis brazos mientras me abrazaba.
Mi estado de shock no me permitía ni liberar una lágrima. Todo se había detenido aunque el tiempo no paraba.

¿Qué es el tiempo para ti? Me refiero a si te dijeran que te queda un mes completo para terminar todas las pruebas ¿Te resultaría muy largo? ¿Lo verías aburrido? ¿Cansado, tal vez?

Pero si te dijeran que sólo te queda un mes de vida ¿Lo verías demasiado corto? ¿Qué harías? ¿Te pondrías a llorar? ¿Te encerrarías en tu cuarto? ¿Te deprimiríais? Quizás, en el mejor de los casos, decidas hacer todo lo que te queda por hacer.

Una noticia así rompe a cualquiera.
El tiempo es infinito pero no para nosotros. En algún momento todo lo vivo muere, aún así, nadie está preparado para la muerte. Y la mayoría de las veces el que le toca morir lo acepta más que los que quedan....

Taehyung en todo el camino de regreso se mantuvo llorando en silencio. Era como si le apenaba llorar enfrente de mí, pero no podía verme sin dejar de destilar agua.
Él parecía mucho más triste que yo. La noticia nos había destruido de una forma en que el silencio que manteníamos era lo más tortuoso que había experimentado. Ni siquiera pudo manejar el coche de regreso y tuvimos que llamar a un taxi para que nos llevara. Las manos de ambos se encontraban enlazadas y aún así el tacto que manteníamos era frío. Pero mi cabeza lo reflexionó todo y empecé a ver hastioso lo que ocurría.

- Tae, basta. No llores más - Le dije mientras me acercaba más a él y le abrazaba.

- Pero Sakura...

- Un mal capítulo no es el final de la historia...

Y si te quedará solo veinticuatro horas. Veinticuatro horas para pasar tiempo con la persona que quieres.

Ahí es cuando te das cuenta que lo importante no es el tiempo, sino lo que haces con el.

¿Qué harías?
La respuesta correcta es vivir.
Siempre vivir.

IMPOSSIBLE//Jeon Jungkook [Completa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora