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Maldiciones y jadeos se escuchaban en la habitación del alfa, Taehyung no dejaba de restregarse en Jungkook, el cuál quería salir de allí, en verdad quería.

Taehyung se quitaba su camisa dejando ver su abdomen y cintura. Jungkook solo desvío la mirada, y en un descuido dejó a el omega debajo. Lo tomó de las manos poniendolas arriba mientras las agarraba con fuerza. Haciéndo gemir de dolor a el menor.

-Quiero que te largues ahora mismo de mi recámara si no quieres que te saque a patadas de aquí._le susurró en su oído de una forma tan escalofriante que hizo helar la sangre de Taehyung_

-P-ero tú.... Él se fué, podemos volver...

-¡Que no joder!, ¡Se fué pero lo buscaré, no descansaré hasta encontrarlo!._tomó a Taehyung del brazo junto con su ropa y lo arrastró hasta la puerta_

-¡Soy tu omega Jungkook!,¡el padre de tu primogénito!._gritó con rabia y dolor por ser rechazado_

-¡No eres nadie!.

El alfa había usado su voz de mando, estaba arto de esto, tenía que dejar en claro quién era su omega y el señor de la Hacienda Jeon Luna.

Taehyung tembló, sus ojos se cristalizaron. Sus manos temblaban, ladeó su cabeza dejando ver su cuello en muestra de sumisión.

-Mi único omega se llama Park Jimin, tuviste tu oportunidad de ser el dueño y señor Taehyung, te fuiste. Alguien más arregló lo que tu rompiste, me enamoró como no tienes idea, y aún que se allá ido. Lo buscaré hasta por debajo de las piedras si es necesario. Y que tú me allas dado a mi primogénito no significa que tengo que estar contigo, reaccioné y me equivoqué al prometerle algo tan estúpido a mi hijo. Puedo hacerme cargo de él sin estar a tu lado. Puedo estar con Jimin, puedo tener más cachorros con mi omega. Así que ¡largo!._gruñó para después de aclararle quien ahora era aquí, solo era el padre de su hijo. Nadie más._

Le cerró la puerta en la cara de un portazo.

Gruñó al ya no tener el aroma de Jimin en su habitación, solo le quedaba la bufanda que estaba llena de foromonas de él. La sacó de donde la traía y la inhaló, mientras se acostaba sobre la cama. Estaba tan agotado, tanto mental como físicamente.

Solo necesitaba a Jimin.

Pero sabia que solo el era el culpable de que no estuvieran juntos. Sus ojos se cerraban del cansancio, quedando dormido. Mañana sería un largo día, tenía que buscar por donde sea Jimin.

Su fresita.

Al día siguiente.

Italia.

Jimin despertaba sin ánimos, hace unas horas habían llegado a Italia. Y solo se había dedicado a dormir. Ya eran casi las 4 de la tarde, bajó las escaleras de la mansión para ir a la cocina. Tenía mucha hambre.

Pidió lo que quiso con la cocinera y lo llevaran al comedor. Su hermano y Lisa aún dormían del agotador viaje de casi 15 horas. No había tenido la oportunidad de hablar con su madre ya que aún no regresaba de trabajar.

Comía con más ánimos, sabía que tenía que alimentarse bien por sus cachorros.

   En la Hacienda.

 
Jungkook había salido desde temprano a sus tierras, quería saber si todo marchaba bien. Se había ido casi todo el día, no le había dirigido la palabra a Taehyung. Estaba muy molesto por lo de anoche. Solo tenía ganas de ir, llegar y jugar un rato con su hijo.

Eres mi fresita ║KOOKMIN║  ♡Omegaverse♡ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora