Jóvenes Vengadores: El comienzo.

Capítulo 20.

Evadiendo a la multitud que los ovaciona, América y Strange se teletransportan al Santuario.

Strange: Bien, ¿de qué querías hablar?

América se retuerce las manos con nerviosismo. No está muy segura de por donde empezar.

América: Bueno... cuando lo enfrenté, cuando Mordo intentó atraerme a su lado como dijiste que lo haría, él me dijo cosas...

Strange: Ya. Te habló de la profecía, ¿no es cierto?

América: ¿Cómo...?

Strange: Hable con Christine. No nuestra Christine, sino la otra, ya sabes...

América: Ah, claro. ¿Y qué te dijo?

Strange: Todo. Que Mordo dijo que de cumplirse la profecía significaría el regreso de la peor amenaza que existe: Kang El Conquistador.

América: ¿Tú lo conoces?

Strange: He oído cosas, leyendas. Hablan sobre un conquistador de universos, un psicópata que se cree un Dios. Destroza líneas de tiempo y reescribe la realidad a su antojo.

América: Mordo habló poco sobre él, dijo algo de una guerra...

Strange: Dicen las leyendas que hace siglos, un científico del siglo XXV descubrió la existencia del multiverso. Él se convirtió en el primer viajero del multiverso. Conoció a otras versionas de si mismo. Compartieron conocimientos y durante milenios, el multiverso prosperó, logrando maravillas y conviviendo todos los universos en paz y armonía.

América: ¿Qué pasó?

Strange: Una de las versiones de este científico enloqueció. Él veía caos en medio del orden. Creía que todos los universos debían vivir bajo un mismo gobierno y que no todos merecían gozar de la prosperidad de su utopía. No todos estuvieron de acuerdo con él. Pero hubo algunos que sí. Con ayuda de esos psicópatas, reunió un ejército vasto y poderoso. Magos, guerreros, seres de otros mundos y de tantos universos distintos se le unieron y desataron una guerra, la Primera Guerra Multiversal. Así, ese científico resurgió como Kang El Conquistador, destructor de universos. Todo el que se le oponía moría. Fueron días oscuros. 

América: ¿Y cómo lo detuvieron?

Strange: Nadie lo sabe. Sólo se dice que en algún momento murió y con su muerte sus seguidores se rindieron y la guerra acabó. Pero hay algo que no me convence de esa historia. No, yo creo que él sigue vivo. Más débil, claro, pero en algún lugar, en algún universo, Kang sigue vivo, y con la posibilidad de regresar todavía. Pero de algo estoy seguro: esta noche América, gracias a tu equipo y a ti, lo detuvieron una vez más.

América piensa.

América: Hay otra cosa. Mordo dijo que él estuvo ahí el día que perdí a mis mamás. Que no recuerdo lo que realmente pasó.

Strange: ¿Y tú que crees?

América se pone de pie, exaltada.

América: ¡Que no es verdad! ¡Yo lo recuerdo todo! ¡Él no estaba ahí! ¡Yo fui la culpable de lo que pasó! ¡Yo...!

América se calla y vuelve a sentarse, abatida.

América: Stephen, como médico que eres dime, ¿es normal que no recuerde nada antes de ese día? Porque no recuerdo nada antes de perder a mis mamás. No recuerdo nada de ellas ni de mi vida en el Paralelo Utópico.

Strange: Bueno, sí. Es normal que no recuerdes cosas. Perder a las personas que amamos nos genera traumas, algunos muy fuertes que alteran nuestros recuerdos y creamos una realidad alternativa en nuestra mente. No soy un experto, pero lo que dijo Mordo podría ser cierto. Podría ser posible que lo que recuerdes no sea completamente cierto.