Estaba en el Bar

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Estaba fumando y bebiendo en el bar, cuando un hombre se me acerco para bailar, tenía ojos color verde y una sonrisa llena de bondad, me dijo que mis pasos eran increíbles y a su mesa me invitó a sentar, me había inspirado confianza así que no dude en seguirlo hasta el lugar. Cuando llegamos la charla divertida se empezó a tornar, hablamos por horas y el tiempo rápido empezó a pasar, en medio de la conversación me dijo que le encantaba mi lunar, que le gustaba mi espontaneidad, que mi belleza era difícil de olvidar, que le atraía cada parte de mi personalidad, me pareció que era muy buena onda así que cuando me ofreció ir a su casa no dude en irlo a acompañar.

En el camino íbamos riendo como locos pues el alcohol en mi sistema había hecho efecto y cuando lo noto un interés peligroso hacia mi no paro de insinuar, cuando me hablaba sus palabras eran secas pero no le presté atención pues creí que esta noche había conocido a alguien interesante y nada podría salir mal, él sabía que estaba en mi fase de vulnerabilidad, la situación la vi rara pero no creí que el de mi se fuera a aprovechar, parecía esa clase de personas que los límites sabía respetar, el me confundió con su falsa caballerosidad. Cuando llegamos un olor nauseabundo y asqueroso me empezó a marear,  le pregunté que era y me dijo que su pez murió porque se le olvidó que lo tenía que alimentar, me pidió permiso para hacer unas fotos a cambio de dinero y me dijo que yo pusiera la cantidad, en ese momento recordé las deudas así que le dije que si y me empecé a desnudar, las fotos eran explicitas y por un momento me empecé a habrumar, no me sentía cómodo y cuando se lo dije su comportamiento empezó a cambiar, me dio miedo así que le dije que me iba a marchar, el saco un cuchillo y me empezó a amenazar, mis ojos de lo nervioso que estaba se me empezaron a nublar, no podía creer que mi vida estaba a punto de acabar, en mi mente solo había millones de escenarios y en todos yo terminaba mal, mi razón me decía que el me tendría aquí encontra de mi voluntad, así que con la poca cordura que tenía empecé a crear un plan, baje la guardia y a su cuarto sin objeción me empecé a adentrar, dijo que veríamos su película favorita y le gustaba verla con la persona que iba a asesinar, en ese instante obligué a mis nervios a llenarse de tranquilidad, el terror que sentia en mis lágrimas se empezó a reflejar, me abrazo y cuando escucho mi corazón dijo que le gustaban los latidos del corazón que iba a torturar, en ese momento lo empuje y con toda mi fuerza lo empecé a golpear, cuando intenté salir el se arrojó hacia mi y me logro derribar, teniéndome en el suelo de una manera dolorosa me empezó a ahorcar, en esos segundos no se como sus manos de mi cuello logré alejar, el cuchillo que había tendido en la cómoda intentó alcanzar, cuando me di cuenta forsejie con el y lo patie cuando el lo quiso agarrar, me puse de pie tome el primer objeto que encontré se lo lance a la cabeza y lo logré desorientar, eso me dio tiempo de quitar los seguros para luego destrabar la puerta y poder escapar.

Al salir de la casa corrí como nunca por las calles gritando que alguien me intentó matar, pidiendo ayuda a los carros que iban pasado por la avenida de esa localidad, al llegar a una esquina una patrulla me empezó a pitar, cuando me preguntaron que me pasaba yo les explique lo que vivi minutos atrás, las escenas siniestras que dieron inicio a los instantes de confusion y temor les empecé a contar, ellos por mi aspecto y color de piel creían que mis palabras carecían de verdad, así que los lleve al cementerio que ese sicópata llamaba hogar, al estar devuelta en el edificio tocó la puerta uno de los policías mientras el otro no estaba muy convencido de actuar, como si nada hubiera pasado el demonio sin ningún signo de remordimiento y descontrol los dejo pasar, yo me quede afuera porque volver a sentir ese frío en mi cuerpo no podía soportar, cuando los perdí de vista escuché cómo los oficiales peleaban con el al intentarlo arrestar, ya que se dieron cuenta que de los hombres afroamericanos del condado desaparecidos el era el asesino serial, por un álbum que encontraron en su librero lleno de imagenes desgarradoras que si veías te iban a perturbar, en ellas se veia como mutilaba las partes de los hombres con una endemoniada felicidad, el no sentía ni vivía con ningún tipo de culpabilidad, lo normal de un desgraciado con más de un problema mental, el acabo con muchos de los míos y le trajo tristeza a mi comunidad.

Al pasar los años la repercusión de sus actos en el día a día me empezaron a afectar, soñaba con los gritos de mis amigos mientras el prendía las máquinas de cortar, el me quito la ganas de seguir y mi alegría no dudó en apagar, el se volvió una leyenda e inspiración en el mundo criminal, mientras los familiares de sus víctimas por estar bien teníamos que luchar, éramos señalados y ridiculizados por la sociedad. La gente actuaba como si lo que hizo no fuera nada grave, como si las perdidas que hubieron no fueran grandes, como si lo que hizo ese monstruo no fuera un acto cobarde, traumo a más de una persona y a nadie párese importarle, tiene un club de fans obsesionados que no dejan de asecharme, le dan un buen trato y le envían dinero en la cárcel, no se hizo la merecida justicia y yo nunca me cansaré de esperar que el pagué.

Escrito por: icónica
Imagen de su autor.

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