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Hoy iba a ser un día muy solitario para mí.

Ya que ni mi madre,lía o amai se encontraban en casa.

No podía salir de mi habitación ya que ayer mientras que estábamos jugando con lía me torció el tobillo y no puedo caminar correctamente.

Que alguien me salve de este aburrimiento!

Estuve leyendo unos libros que desconocía y que se trataban del cuerpo humano.

Cómo sus funciones,hormonas y lo que más me llamo la atención...

Cómo se hacen los bebés.

Eso es algo muy nuevo para mí ya que mamá nunca me explico esto.

Es una forma muy...

Curiosa?

Pero cambiando de tema.

Estoy muy aburrida.

Estuve remodelando la habitación secreta.

Me quedo muy linda.

Tengo algunos libros y plantas en la habitación para poder entretenerme.

Knock knock.

Alguien toco la puerta de mi habitación.

Quien podría ser?

-puede pasar- dije en voz alta.

Al abrirse la puerta Vi por el costado del ojo una sombra alta.

Eso no era una de nuestras empleadas.

-Quien es- hablé pero al verlo descubrí quien era.

-me extrañaste?...- hablo está vez el

Rápidamente me levanté ignorando el dolor que me provocó eso.

-entra rápido antes que te vean- susurré al llegar a su lado y cerrando la puerta con seguro.

Apoye mi frente contra la puerta dándole la espalda pero sentí como su mano se posaba en mi cintura y el se recostaba en mi espalda para poder hablar en mi oído.

-te extrañe desmasiado~- hablo Bel con su profunda voz en mi oído.

-yo también Bel...estás bien?- pregunté ya que estas actitudes no eran comunes en el.

El solo apegó más su cuerpo al mío tomándome de la cadera.

-te quiero solo para mi...siguió diciendo ya correr mi cabello y besar la parte de atrás de mi cuello.

Solté un suspiro por su repentina acción ya que me generó un escalofrío y una rara sensación.

-Bel que haces?- pregunté nerviosa por la acción del mayor.

No dijo nada solo me hizo voltear haciéndome quedar viendolo hacia arriba por la diferencia de alturas.

Empezó dándome un lindo beso cuál empezó a subir de nivel cuando sin previo aviso empezó una guerra entre nuestras lenguas.

Guerra cuál estaba dominada por Bel ya que yo era inexperta.

Al separarnos un hilo de saliva colgaba por nuestros labios.

Empezó a besar y marcar mi cuello dejando marcar grandes como pequeñas.

Sus manos recorrían mi espalda pasando de mi cintura a mis glúteos.

R U mine? Belcebú X LectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora