Terrestres {{Clexa}}

Capítulo 24 - Confrontaciones del Consejo

"He oído rumores, Kriyo kom Azgeda, de que plana Nia busca una alianza con Skaikru". 

El tono de Lexa era suave, pero todos los representantes de los clanes reunidos se removieron incómodos y se miraron entre sí. Krio estaba de pie frente a ella, con guardias a cada lado. 

"¿Para esto me habéis traído a Polis? ¿Para hacerme preguntas? Seguro que Heda tiene cosas mejores que hacer".

La sala enmudeció y los guardias que estaban junto a Krio empuñaron las empuñaduras de sus espadas.

"Te dirigirás a Heda con respeto", dijo Titus desde su posición a la derecha de la silla del comandante. Krio lo miró con odio en los ojos. Lexa ladeó ligeramente la cabeza, como si tratara de encontrarle sentido a algo ridículo. 

"Nia se niega a unirse a la kongeda", dijo, "y sin embargo te envió a ti y a otros dos a Arkadia".

Los ojos de Krio se abrieron de par en par y los demás representantes de los clanes murmuraron entre sí. Miró alrededor de la sala, como buscando aliados, pero nadie lo miró. Ella lo había sorprendido con ese conocimiento, y ahora lo tenía en posición defensiva. Una ligera ventaja para ella, pero hombres como Krio podían ser aún más peligrosos cuando estaban en retirada.

"¿Acaso Nia cree que podrá desafiarme si cuenta con el apoyo de Skaikru?", insistió, más para asegurarse de que el consejo la escuchara que para obtener una respuesta de Krio. 

Conocía el valor de una idea sembrada, y aquí, la presentación de la misma sembraría la duda en las mentes de aquellos que podrían no apoyar completamente a Nia pero no estaban del todo cómodos con el liderazgo de Lexa.

No dijo nada, lo que sirvió más como admisión de culpa que cualquier otra cosa verbal. Los guardias a ambos lados de él se acercaron.

"O tal vez Nia todavía quiere a Wanheda, y la utilizará para comprar el apoyo de Skaikru".

"Wanheda es la razón por la que eres débil", dijo Krio, prácticamente escupiendo las palabras. "Ella destruyó el Maunon mientras que tú no lo hiciste. Nia busca fuerza en un Comandante..."

"Nia busca ser Comandante", corrigió Lexa antes de que Titus pudiera decir nada. Los demás representantes guardaron silencio. Krio apretó la mandíbula. "Lo que me lleva a cuestionar, de nuevo, la presencia de guerreros de Azgeda tan cerca de Polis y de Arkadia. Quizás Nia busca crear una guerra entre Trikru y Skaikru que luego pueda explotar".

Murmullos y miradas furtivas circularon por la sala. Krio se negó a responder, pero Lexa detectó que lo había arrinconado en una esquina de la que no podría escapar.

"Si Nia cree que soy débil, tal vez podría llevar sus quejas al consejo, en lugar de escabullir guerreros a los bosques e intentar crear alianzas con Skaikru".

Aún así, Krio permaneció en silencio.

"Heda, ¿puedo hablar?"

Lexa desvió la mirada hacia la representante de Floukru, una mujer que inspiraba el respeto de todos los representantes. 

"Sha, Atlan kom Floukru ", dijo.

"Todos somos conscientes de que hay guerreros de Azgeda en los bosques cercanos al territorio de Trikru. El representante de Nia nos ha asegurado que se trata simplemente de una medida de precaución, pero todos hemos visto lo que Nia ha hecho en el pasado una vez que desplaza a los guerreros cerca del territorio de otro clan". 

Otra ronda de susurros y murmullos. 

"Y ahora nos enteramos de que el representante de Azgeda se ha puesto en contacto con Skaikru sin informar al consejo. Como todos sabemos, Nia aún no se ha unido al kongeda. Yo diría que Heda tiene razón al hacer estas preguntas al representante del clan Azgeda".