capítulo diez;

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Los hermanos Stabbington habían decidido hablar con Harry a primera hora de la mañana. Lo habían citado en un lugar apartado de la zona poblada para no ser escuchados por absolutamente nadie. Harry había aprovechado que Louis dormía para salir a ese encuentro y ver lo que quería la pareja de hermanos.

— Por fin llegas. — bufó Patchy.

A los gemelos no les había gustado la tardanza del rizado.

Harry bostezó porque se había levantado muy temprano y no le había dado tiempo a espabilarse.

— Buenos días, grandullones.

— Harry — advirtió malhumorado Sideburns. — Te hemos dicho-

— Un millón de veces que no nos llames así. — cortó el rizado, acabando la frase por él e imitándole con voz grave. — Sí, ya lo sé. — fue mirado mal por ambos hermanos. —Bueno, para que me queríais, no tengo todo el tiempo del mundo.

Habló primero el gemelo mayor. — Te queremos hacer una advertencia.

—Ya sabemos quién es tu amiguito. — acabó diciendo Sideburns.

Un poco de nervios se acumularon en Harry. Intentó actuar lo más normal que pudo para que los que tenía enfrente no lo notaran.

— ¿Quién va a ser? Louis, mi amigo. — dijo tranquilamente.

— Tu amigo es el jodido príncipe de Zenttokya. — reveló Patchy sin darle más vueltas, con una sonrisa socarrona. — ¿No pensabas decírnoslo?

— No os incumbe, grandullones.

— De hecho, es un dato bastante importante qué nos incumbe, y mucho. — agregó Sideburns.

— El heredero Harry, el heredero. — enfatizó el mayor de los gemelos.

— Bueno y ¿qué? No tiene nada de malo. — defendió el rizado.

— ¡No! Todo lo contrario. Tienes un tesoro, Harry. — Sideburns rió, dándole una palmadita en el hombro a un Harry no muy contento qué se apartó molesto.

Patchy siguió. — Un tesoro que queremos.

Harry los conocía perfectamente así que no dudó en preguntar. — ¿Qué estáis planeando?

Ambos hermanos rieron.

— No te vamos a contar eso a ti. — dijo el menor de los hermanos. — Solo queríamos decirte que te queda poco tiempo.

príncipe omega; lsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora