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Nuevamente era la hora de la comida, así que Gulf luego de pasarse la mañana haciendo sus labores de granjero, regresó a la casa.

Tras comer algo tendría que conducir la camioneta una vez más hasta el pueblo, para así vender todo lo que pudiese en su humilde puesto.

Este quería vender lo máximo posible para ayudar al alfa y reunir el dinero para que este pudiese regresar a su país y recuperar su vida pues él sabía que no era feliz en la pobreza.

El moreno omega se quedó muy sorprendido cuando entró y vio a su madre muy sonriente charlando con el alfa, el cual reía también sentado a la mesa en la silla de ruedas.

...-Ah ...hola cielo, ahora mismo iba a llamarte para comer pero me he entretenido aquí charlando con Mew... Anda ve a lavarte y siéntate que ahora sirvo la comida.

El alfa había salido de su auto encierro voluntariamente e incluso se reía junto con su madre, por ello Gulf creía estar alucinando.

A su regreso del lavabo, se sentó a la mesa y entonces su madre les sirvió la sabrosa ensalada y un trozo de la tortilla de patata que había hecho.

-Gracias mamá.

-Si gracias,Anne. Eres muy amable-dijo el alfa muy gentil tras recibir otra ración.

-De nada. Debes alimentarte bien, anda come todo lo que quieras.-dijo la omega de nuevo sonriéndole.

El omega se sentía como si hubiese entrado en otra dimensión, desde el día anterior y tanto el alfa como su madre habían experimentado una clase de metamorfosis.

Incluso lo asustaba pues no sabía si era que Anne había perdido la cabeza o el alfa estaba haciendo un papel y tenía pensado asesinarlos mientras dormían.

-Gulf...hijo...¿te pongo más?...hey hijo... ¿estás bien?-le dijo su madre pasando la mano ante sus ojos, para que saliese del trance en el que parecía estar metido.

Este finalmente reaccionó y miró a la omega y luego al alfa.

-Si emm....si mamá...que...ah si, gracias.

-Cariño, ¿estás bien?

-Si... es solo que... bue-bueno se os ve tan bien que... no sé, ¿me he perdido algo?

Anne y Mew rieron una vez más.

-Ay hijo, que susto me has dado. Pensé que te había dado algo-dijo la omega sentándose también a la mesa-...verás, resulta que aquí nuestro invitado, ha recapacitado y ha decidido dejar de portarse como un bebé caprichoso y aceptar nuestra ayuda y su nueva vida humilde.

El alfa asintió conforme.

-Si bueno, quería pedirte disculpas a ti también Gulf y darte por fin las gracias por no dejarme morir en medio de la nada-dijo el alfa clavando sus hermosos orbes en el omega que lo miraba asombrado.

-No tienes po-porqué darme las gracias y me alegro que por fin hayas recapacitado... Verás como pronto te recuperas y podrás volver a tu vida en Bangkok...en cuanto consigamos el di-dinero podrás irte- respondió Gulf bajando su mirada con esa última frase pues no quería que el alfa se fuese nunca.

Mew levantó su vaso con leche y sonrió.

-Brindemos porque así sea.

El tono de voz del alfa ahora menos autoritario, menos chillón, más armónico y dulce lo había dejado anonadado.

-Hijo, levanta tu vaso y brindemos con Mew...de verdad hijo hoy estás muy despistado, ¿Seguro qué te encuentras bien?.

El omega asintió levantando su vaso también para brindar.

-Si...emm, perdón.

-Bueno, al parecer estamos en igual de condiciones e incluso yo estoy en una situación inferior a vosotros pues dependo de ti y de tu madre-habló nuevamente el alfa-.... Aunque me mate mi orgullo y me rompa todos los esquemas, he de reconocer que sois los mejores omegas que me he topado en la vida y ojalá me hubiese topado con más como vosotros.

-Mu-Muchas gra-gracias -balbuceó el omega aún más nervioso que antes.

Finalmente todos disfrutaron de la comida que tenían en sus platos, no sin antes rezar una oración a Dios, dando las gracias por los alimentos y las cosas buenas que la vida les estaba brindando.

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31. Esperando a mi omega- Parte 1- MewGulf - Omegaverse  TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora