Canto

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ONRYŌ

Autora: Clusmykitty

Fandom: Kimetsu No Yaiba/Omegaverse

Pareja: Uzuren.

Derechos: a que el senpai se dé cuenta de mí.

Advertencias: esto es un AU de mafia, por lo que habrá cosillas desagradables, algo grotescas, incómodas porque estos mundillos no son jardines de rosas perfumadas. Y como es un Omegaverse las cosas se ponen de color hormiga. Que no les digan que no les cuenten porque les mienten. Una historia de encargo.

Gracias por leerme.


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Canto.


Long walks in the dark through woods grown behind the park
I asked God who I'm supposed to be
The stars smiled down on me
God answered in silent reverie
I said a prayer and fell asleep

I had a dream
That I could fly from the highest tree
I had a dream

Dream, Priscilla Ahn.


Mansión Uzui.

Clan del Sonido


Su padre le dijo que nunca serviría.

Tengen le creyó de por vida.



En el Clan Uzui, las cosas se llevaban a otro nivel porque eran nada menos que los herederos de la vieja tradición ninja, por su sangre corrían los grandes secretos de todos esos estupendos guerreros cuyas habilidades ocultas bajo las sombras habían elevado el apellido del clan al nivel suficiente para que se les considerara una fuerza a temer. Lo que implicaba para sus miembros entrenamientos que rayaban en la tortura, porque solamente los más fuertes eran los que eran dignos de llevar el nombre sagrado por el cual eran de las casas más respetadas entre los yakuzas.

Tengen aprendió desde cachorrito que si deseaba tener un día de descanso, su única posibilidad estaba en ser superior a sus hermanos. Y debía esforzarse el doble por ello, cuando los demás cachorros Alfas estaban corriendo un kilómetro, él corría dos. Si todos nadaban dos horas, Tengen hacía tres. Resistió hambres, sueños, cansancios con tal de sobrevivir, de cambiar la opinión de su padre sobre él, porque no le miraba ni le decía palabra alguna de aliento como al resto de sus hermanos, simplemente por haber nacido ligeramente más pequeño de cuerpo, ese mismo que entonces decidió transformar a uno fuerte, alto y veloz como el sonido para callar todo rumor a cerca de su persona.

Como dictaba la tradición familiar, recibió tres esposas Beta, en espera de que pudiera continuar con el legado de sangre pura de los Uzui. Sus tres esposas eran hermosas, como adiestradas en el fino arte Shinobi y así asegurar que los siguientes cachorros tuvieran esa herencia digna del clan. Las tres eran Betas, si bien parecían a veces más Alfas que otra cosa por sus personalidades. Makio, Suma y Hinatsuru enseguida hicieron migas con él, incluso apoyándolo en esa suerte de cruzada personal por alcanzar el máximo nivel y ser superior a todos sus hermanos, curando sus heridas cuando regresaba de los entrenamientos, atendiendo las necesidades de su casta con discreción.

OnryōDonde viven las historias. Descúbrelo ahora