XII

4K 531 18
                                        

Eddie no salió de su celda por varios días, se podría decir que por una semana. Tan fuerte era la migraña que no tenía tantas ganas de levantarse.

—Eddie, creo que deberías acudir a un doctor.

—No es necesario, estaré bien—mentía, estaba muy mal.

—No te creo—se cruzó de brazos su compañero—. Avisaré a los guardias que estas enfermo—288 salió de la celda como si nada.

Parecía que los reclutas podían andar por ahí, esa cárcel era extraña, todavía era un misterio porque Cletus estaba ahí, un psicópata como él debería estar en una cárcel subterránea.

Eddie sentía escalofríos y mucho dolor de cabeza, su cuerpo estaba ardiendo en fiebre.

—Odio enfermarme—musitó casi en susurro, evitaba hablar porque su garganta también le dolía.

Lo sentimos Eddie, no te cuidé lo suficiente.

—Ya te dije que no todo es tu culpa, también era mi responsabilidad cuidarme.

Venom formó un torso y al lado de Eddie se colocó. Estaba acostado en su cama intentando dormir.

Venom con una de sus manos tocó la frente de su compañero, algo preocupado bajó su cabeza.

—Sí sigues con esa actitud es probable que mi salud empeore. Si quieres que mejore entonces no estés triste—sonrió un poco el castaño.

Con algo de dificultad el simbionte sonrió, aún se sentía culpable.

—Mi medicina es tu sonrisa, V—volvió a hablar. Eso fue suficiente para que Venom lo abrazara con fuerza.

Venom acariciaba el cabello de su anfitrión para hacerlo dormir un poco, y le daba uno que otro mimo.

Los dos se sentían agusto con el otro, no hacía falta una simple pastilla para los dolores.

Entre ellos eran la medicina, entre ellos se curaban, ellos eran su felicidad.

Blood prison | SymbrockDonde viven las historias. Descúbrelo ahora