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La gran CELEBRACIÓN se acercaba, ya se sentía en los na'vis la emocion de decorar y hacer todos los preparativos para el cumpleaños de la princesa, quien se encontraba extremadamente nerviosa.
Tsireya y sus padres eran los más entusiasmados con la celebración, querían que todo saliera perfecto y fuera un hermoso cumpleaños.
Ya estaba confirmado, vendrían na'vis de otros clanes, como las Tsahik y/o los Olo'eyktan, gente del pueblo, guerreros, cualquiera era bienvenido.
¿Pero los padres de Selen'ka vendrán? Nadie lo sabia. No habían presenciado el cumpleaños de la mayor por 3 años, a excepción del número dieciséis, pero se olvidaron completamente de ese. Tal vez este año era diferente y se dignarían a asistir.
— ¡Gran Eywa! Qué emoción. Debes ser la mejor vestida. — Decia Tsireya mientras buscaba joyas y vestimentas para Selen'ka, quien estaba recostada a un lado de la habitación observando como la metkayina caminaba de un lado a otro buscando algo para la princesa. — Debes resaltar, que nadie te opaque.
Kiri quien estaba a un lado de la habitación observaba divertida la situación. — Tal vez haya que crear uno nuevo. — Dijo como sugerencia. Tsireya se detuvo y se giró lentamente hacia la omaticaya acercándose rápidamente quedando a centímetros de su rostro.
