𝗟𝗫𝗫𝗫𝗜𝗜

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─ ¡Sun! Te fuiste corriendo y no me esperaste... ─ Heeseung sonaba ofendido, con la silla a centímetros de la puerta del comedor, sin poder pasar del umbral para no caer por la rampa, bastante empinada, pero se detuvo cuando vió a los tres secándose lágrimas inútilmente. ─ No lloren, me harán llorar también... ─ parpadeó para despejar su vista. ─ ¿Por qué lloran?

Seungie.

El castaño pareció tardar un momento en creerlo, mirando a Jake mientras sus ojos se iban llenando cada vez de lágrimas, hasta cubrir su rostro con sus manos y comenzar a llorar.

Jake fue a abrazarlo, y el otro correspondió.

Sunoo anunció que iria a buscar a Jay, dejándolos a los tres en el comedor.

Heeseung no pudo evitar ver las marcas en el cuello de Jake.

─ ¿Tú y...Lo...?

Jake negó.

Algo. ─ murmuró.

─ ¡Shim Jake!

Saltó un poco al escuchar el grito de Jay, que había entrado corriendo al comedor.

─ Dime que Sunoo no me miente. ─ habló, Jake vió detrás de él, a Jungwon y a otros que se asomaban en la puerta.

No. ─ dijo, negando.

─ Awww, bebé. ─ el mayor lo abrazó con fuerza, sonriendo ampliamente, sintiéndose a desbordar de ternura por aquella silaba que había sonado como un pequeño "No".

Su director sacó su celular, donde Jake marcó el teléfono de su madre, hablando con ella por primera vez, con lágrimas cayendo por su rostro, y Sunghoon abrazándolo, ayudándolo a mantenerse de pie.

Jake seguía siendo bastante callado, respondía con pocas palabras, y hablaba muy bajo, en un tono sutil, que hacia que todos hicieran silencio para que se pudiera escuchar su suave y tierna voz.

Sin querer hacerlo a propósito, continuaba haciendo señas para hablar, acompañando sus palabras, lo que a veces hacia que tuviera que cortar la palabra para que acompañara al gesto; y hasta llegó a seguir hablando en señas, mientras murmuraba sonidos incoherentes.

La señora Shim habló con Jay, pidiéndole que los trajera a ambos chicos ese mismo día, el mayor no se negó, y les dijo que juntaran sus cosas inmediatamente que volverían a Seúl en cinco minutos.

Sunghoon y Jake obedecieron, con ayuda de Sunoo, guardaron todo a presión en sus valijas y lo llevaron hacia la camioneta de su mayor.

Se despidieron de sus amigos, quienes dijeron que intentarian volver lo más pronto posible, y que se aburririan sin ellos.

𝗟𝗢𝗩𝗘 𝗠𝗘, 𝗠𝗨𝗧𝗘 » 𝘀𝘂𝗻𝗴𝗷𝗮𝗸𝗲 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora