𝗟𝗩𝗜

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Jay estacionó la camioneta frente a la casa de los Shim, tocando bocina repetidas veces, haciendo que la señora Shim se molestara por tanto ruido.

Su sorpresa fue bastante cuando el vidrio polarizado del asiento del acompañante bajó, dejando ver a sonrisa de disculpa del moreno.

─ ¿Director Jungwon? ─ Sunghoon lo reconoció automáticamente.

─ ¡Él no es tu director! ─ se quejó Jay, bajó del vehículo y tomó el bolso que Jake casi venia arrastrando desde la casa, para levantarlo sin esfuerzo y llevándolo hasta la parte trasera de la camioneta. ─ A mi me llamas por mi nombre, ni siquiera un gramo de formalismo, y le dices director a otro.

Sunghoon rió un poco.

─ ¿Quieres que te llame Omma Jay? ─ preguntó, con lo que el pelinegro frunció el ceño.

Escucharon la risa de Jungwon desde donde estaban, el moreno asomó la cabeza por la ventana para mirarlos con diversión.

─ ¿Recuerdas cuando nos juntamos a beber y estabas tan borracho que empezaste a decir que eras la madre de todos? ─ le recordó, Jay se ruborizó de la vergüenza. ─ Empezaste a decir que teniamos que llamarte Omma Jay.

Jay de detuvo un segundo, totalmente ruborizado, hasta que arrojó con fuerza el bolso de Sunghoon en la cajuela.

─ Cállense, lo que único que recuerdan de esa noche es eso, idiotas.

Sunghoon rió, porque tenía razón, casi todas las demás memorias eran de los videos, captados con el celular de Sunoo pero grabados por Jake.

─ No. ─ se quejó Jungwon, aunque sólo quería pelear con el mayor. ─ Recuerdo cuando Sunoo y Sunghoon se-

─ ¡No lo digas! ─ lo interrumpió el rubio, haciendo reír a los otros. ─ Vomitaré.

─ ¡Suban de una vez! ─ se quejó el mayor. ─ Voy a tener que soportarlos más tiempo si seguimos aquí. ─ añadió, antes de rodear el vehículo y subir al asiento del conductor.

Sunghoon se volteó para ver a Jake, quién estaba hablando con su madre, moviendo sus manitos.

Apenas podía entender unos cuantos gestos, pero supo que Jake le prometía que se cuidaría, que no haría nada malo, entre cosas como dormir temprano y no alejarse mucho de los demás.

La señora Shim le dejó un beso en la frente como despedida y Sunghoon estiró el brazo hacia Jake, su novio tomó su mano con seguridad, entes de subir al vehículo.

𝗟𝗢𝗩𝗘 𝗠𝗘, 𝗠𝗨𝗧𝗘 » 𝘀𝘂𝗻𝗴𝗷𝗮𝗸𝗲 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora