"Romeo save me I ' ve been feeling so alone..."
Donde Pedri al fin puede ser el príncipe de brillante armadura que siempre quiso ser para Aurora Messi
【 historia corta 】
【En proceso】
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Doha, Qatar, 2022
— Aurora está loca — Gavi hablaba mientras hacían bicicleta en el entrenamiento — Ha publicado esa foto y el mundo se fue al carajo, me encanta.
Gavi se había autoproclamado nuevo fan de la chica y, según él, "los cojones que tiene para reírse de todo", la había seguido en instagram, hablaban a veces y la castaña le había caído de maravilla, por eso trataba de alentar a Pedri a formar más relación con ella. Aurora tenía carácter y a Gavi le gustaban las mujeres con carácter, así que se encontraba en una misión secreta para unir a aquellos dos.
— Ella siempre ha hecho oídos sordos a este tipo de cosas — contestó el canario — Ya recuerdo cuando se decía que ella salía con otro jugador y ella simplemente ignoraba a todos.
— ¿Y tú cómo sabes eso?
— Es Aurora, tío — respondió el pelinegro como si fuera obvio — Toda España habla siempre de Aurora.
Guste o no, esto era cierto, el apellido Messi era tanto una bendición como una maldición para la castaña, porque la pobre no podía hacer nada sin que los medios se enteraran, no podía tomar decisiones sin que todo el mundo opinara de ella. En una de las tantas charlas que Pedri y Aurora tuvieron, la argentina le confesó al español lo raro que se le hacía tener cierto tipo de "fama" cuando en realidad ella no era nadie, hablo de lo raro que era ser reconocida por ser "la hija de…" aunque ella solo trataba de ignorar todo, vivir su vida normal porque al fin y al cabo, no iba a vivir una fama que no era de ella y no le correspondía.
— ¿Hoy iras a verla? — pregunta Gavi.
— Si Luis me da el permiso si — reconoció el español — Seguro juguemos al fifa, es mejor que tú jugando… eso dice mucho.
El menor de la selección española rodó los ojos. Su amigo no paraba de descansarlo ni siquiera cuando tenía una chica en la mente; y todo el tema de Aurora terminó cuando su DT los llamó para seguir con el entrenamiento.
(...)
— ¡Lola! — el llanto de Ciro alertó a la castaña.
Aurora dejó su celular y corrió hasta el patio de juegos otra vez. Ciro se había caído de la cama elástica y estaba llorando.
La castaña y el español habían vuelto a salir, esta vez fuera del predio donde se hospedaban y con los más pequeños. Habían encontrado un lugar con camas elásticas, era una especie de shopping muy turístico, Ciro, Mateo, y Thiago estaban muy ansiosos por ir y los dos mayores los acompañaron.
En realidad, iba a ser una salida de hermanos, pero cuando el español apareció a la vista de los tres menores buscando a Aurora en la sala de juegos, no lo soltaron.
