Un Oscuro Secreto

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- ¿Vas a decirme la verdad o no? - exigió Andeyla a los adultos frente a ella.

Después de reagruparse en el bosque, asegurarse de que todos estaban sanos y salvos y tranquilizar un poco a los menores, volvieron a su hogar en las montañas. Neytiri se quedó con sus hijos, no quería dejarlos solos después de lo que paso, para Jake era lo mismo, sin embargo, había asuntos pendientes que debía resolver. Escuchar a Andeyla pronunciando el nombre de aquella persona casi lo hizo temblar, ¿Cómo sabía de ella? ¿Quién se lo había dicho? Inmediatamente llegando la na'vi ya más recuperada del shock, exigió que le dijeran lo que estaba pasando obligando al Olo'eyktan a hablar con ella. Neteyam los acompaño hasta la base no queriendo perder de vista a su amiga, además de asegurarse de que está no perdiera los papeles.

- Lo haré- dijo Jake agotado por la situación, realmente no estaba de humor para eso. - pero no ahora. Viste lo que acaba de pasar - le reclamó- lo viviste. Prometo decirte todo lo que quieras en la mañana.

- Pero quiero saberlo ahora - dijo la na'vi. A su lado se encontraba Max y Norm que no habían dicho ni una palabra desde que llegaron.

- Es una larga historia - dijo Jake tocándose el puente de la nariz, su cabeza comenzando a pulsarle del dolor. - no puedo lidiar con eso ahora.

- Andeyla...mi padre tiene razón. Ha sido un día difícil - intentó Neteyam.

- Pero...

- Lo hablaremos en la mañana - dijo Max hablando por primera vez desde que le dijeron lo que había pasado. El hombre no se veía feliz- es muy tarde. Deben descansar.

- Pero yo- volvió a intentar la chica siendo callada de golpe por el científico.

- ¡Dije que no! - alzó la voz provocando que diera un pequeño brinco en su lugar. Max nunca solía gritarle. - Guarda tus preguntas para mañana, hablaremos cuando todos estemos más calmados. Necesitas la mente fría. - sentenció el hombre. Andeyla bufó, sabía que no los haría cambiar de opinión así que con los dientes apretados salió del lugar hacia su marui siendo seguida por su mejor amiga.

- Andeyla - la llamó haciéndola detenerse. - lo lamento. Debes entenderlos ha sido un día difícil para todos y...

- Lo sé- habló la chica interrumpiéndolo, no quería escuchar como justificaba a los adultos. - es sólo que...estoy tan confundida- admitió dejando salir un suspiro lastimero.

- Entiendo...mañana todo será más claro. - animo el mayor poniendo una mano en su cabeza en un gesto cariñoso. - pero, primero debes descansar.

Andeyla asintió, no podía ser tan egoísta, sabía lo horrible que había sido para los demás también, sin mencionar que se habían llevado a Spider, su hermano. Entre eso y el nombre que no dejaba de repetirse en su cabeza parecía que estaba a punto de estallar. Necesitaba respuestas o se volvería loca.

- De acuerdo- cedió la na'vi sintiendo como el cuerpo comenzaba a pesarle, la adrenalina abandonándola dejando todos sus sentidos agotados- creo que si lo necesito. Gracias Teyam. Debes irte, Neytiri te estará buscando...

- ¿Segura que quieres estar sola? Sabes que puedes venir con nosotros. - la chica negó con la cabeza rechazando la invitación.

- Necesito estar sola...hay cosas que debo pensar.

- De acuerdo - dijo el chico no queriendo insistir demasiado. - si cambias de opinión sabes que eras bienvenida.

- Lo sé...Descansa- se despidió la na'vi dando un ligero apretón a una de las manos del contrario.

- Nos vemos mañana- dijo Neteyam un poco reacio a dejarla ir, sin embargo, sabía que la chica necesitaba su espacio en esos momentos. La vio alejarse a su marui con una sensación rara en el pecho, era como si le estuvieran apretando el corazón.

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