DESTINO

El Primer Amor

Neteyam se había despertado temprano junto con el resto de su familia, comenzaron a organizar todas las cosas notando que cierta chica faltaba en el Marui, incluso su lugar ya estaba limpio y ordenado. El chico sonrió pensando que su amiga no podía estarse quieta por mucho tiempo. Amiga... Esa palabra cada vez sonaba más extraña cuando se refería a Andeyla, como si ya no encajara con la imagen de la chica, y para él pensar en la na'vi como solo una amiga era cada día más difícil. Sonrió al recordar como el día de ayer había sido ella la que, hecho el acercamiento, sus labios se habían sentido increíblemente suaves sobre su mejilla, no pudo evitar preguntarse cómo se sentirían sobre sus labios.

- Neteyam, atrapa- dijo Jake lanzándole una cesta donde guardaban las mantas en las que dormían, Neteyam tenía buenos reflejos, pero en ese momento estaba demasiado perdido en sus pensamientos haciéndolo reaccionar tarde dando como consecuencia que la canasta lo golpeara y que además dejara caer todo lo que tenía en sus manos. Ahora debía volver a empezar. - Creí que lo atraparías.

- Lo siento, estaba distraído - se disculpó el chico comenzando a recoger el desorden de nuevo.

- Mamá, ven a nadar conmigo, quiero mostrarte a mi ilu- dijo la pequeña Tuk a su madre que ya había terminado de guardar sus cosas.

- Le dijimos a Ronal que la acompañaríamos hoy - dijo la mujer tomando la mano de su pequeña que comenzó a jalarla hacia la salida.

- No quiero ir, es aburrido. - se quejó la menor.

- Podemos ir después de ir con la Tsahik, está siendo amable al enseñarnos.

- Si, muy amable - dijo Kiri de manera sarcástica yendo en dirección a la salida. - iré a nadar un rato.

- Voy contigo - dijo Lo'ak siguiendo a su hermana dejando solos a Jake y Neteyam.

- Parece que sólo somos tu y yo, hijo. Vamos, Tonowari me enseñó una técnica para limpiar el pescado.

Neteyam sonrió siguiendo a su padre, le gustaban los momentos padre e hijo, siempre había sido cercano a Jake y agradecía poder retomar su tiempo juntos como cuando él era pequeño.

Hijo y padre se sentaron en la orilla del Mauri, cada uno con un pez en la mano mientras que en la otra sostenían sus cuchillos.

- Dijo que debíamos hacer un corte en el estómago así sería más sencillo destriparlo... - Jake comenzó a explicarle a su hijo la nueva técnica que había aprendido, una lástima que este tenía su mente en otro lugar.

Neteyam se preguntaba dónde estaría Andeyla, quizá a la próxima tendría que levantarse más temprano para topársela y quizá así podrían ir a dar una caminata mañanera por la playa o ir a nadar en sus ilu, podría ser una buena idea invitarla a pasear en ilu más tarde, solo ellos dos, sin sus hermanos cerca. La solo idea de que la chica correspondiera sus sentimientos lo tenía sonriendo como idiota, al principio creía que no sería posible, pero había momentos como los de ayer que lo hacían pensar que ella también podría verlo de manera diferente o quizá solo estaba viendo lo que quería ver... Era confuso.

- Y así es como lo haces. - finalizó Jake mirando a su hijo. Neteyam parpadeo un par de veces antes de volver a la realidad notando que su padre ya tenía el pescado desmembrado y listo mientras que él seguía sosteniendo al animal intacto. - ¿Entendiste?

- Ah... Yo... - Neteyam miró a su padre intentando recordar alguna de las palabras que le había dicho fracasando en el intento.

- No me estabas prestando atención - dijo el mayor dejando de lado las cosas que tenía en su mano para centrar su atención en su hijo que lo imito dejando todo de lado. - ¿Qué pasa, Neteyam? ¿Qué es lo que te tiene tan distraído?