"No importa que camino elija, la vida siempre me llevará hacía ti, porque tú eres mi único destino"
El amor y la amistad están a un paso de distancia, la línea que los separa puede volverse borrosa en ocasiones. Andeyla vivía una vida feliz, no era...
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La corneta se escuchó por toda la aldea anunciando qué había llegado un visitante, uno que todos ya conocían. Una Omaticaya. El vuelo de su ikran se veía desordenado, casi forzado como si tanto el animal como el jinete estuvieran luchando por llegar hacia la orilla. El aterrizaje no fue suave ni mucho menos, Nala cayó rendida en la arena provocando qué la na'vi sobre ella cayera de su lomo por el impacto quedando ella también tirada en la arena.
- ¡Es la chica de Sully! - grito uno de los guerreros del clan al identificarla.
- Ella volvió.
- Por fin apareció-comenzó a murmurar la gente en torno a ella. Al notar esto Andeyla intento levantarse, pero estaba tan cansada que apenas se puso de pie sus piernas le fallaron, creyó que volvería a estampar con la arena cuando unos brazos la atraparon en el aire. Al alzar su mirada se encontró con Aonung qué la miraba sin poder creérselo.
- ¿Aonung? - pregunto la chica mirando detrás de él, pudo ver a Tsireya, Lo'ak, Tuk, Neteyam, Jake y los otros correr hacia ella. Cuando sus ojos se toparon con los de Neteyam sintió que por fin podía descansar. Después de tanto al fin podía relajarse, por fin estaba en casa, por lo que sin esperarlo su cuerpo dejo de responderle entrando en una completa oscuridad. La chica se había desmayado.
- ¡Andeyla! - grito Aonung preocupado cuando sintió el cuerpo de la chica desvanecerse entre sus brazos. Se arrodilló en la arena acomodando mejor el cuerpo inconsciente de su amiga, intento moverla, pero esta no reaccionaba. -Despierta, oye ¡Despierta!
- Es ella – exclamó Tsireya cuando llego enseguida de su hermano. Pronto Jake y Neytiri también estuvieron a su lado arrodillados para inspeccionar a la chica.
- ¿Qué paso? – preguntó Jake comenzando a inspeccionar a la chica que seguía en los brazos del metkayina.
- No lo sé, simplemente se desvaneció – respondió Aonung alarmado de que algo malo le estuviera pasando a la chica.
- Papá ella ¿está bien? – preguntó Neteyam sintiendo pánico al ver el estado de su amiga. Todos habían pensado que la chica ya estaría en el bosque para esos momentos, su sorpresa fue grande al saber que había vuelto, pensó que había cambiado de opinión y había regresado a ellos, pero al verla así supo que algo malo debió haber pasado. – Papá – dijo el chico desesperado al no tener respuesta. Se inclinó enseguida de sus padres queriendo ver más de cerca a la chica. Detrás de ellos estaban los otros chicos Sully igual de alarmados.
- Está respirando – dijo Jake después de comprobar que no tuviera ninguna herida grave en su cuerpo.
- Hay que llevarla con la Tsahik – dijo Neytiri mientras se levantaba del suelo. Jake asintió con la cabeza tomando a la chica de los brazos de Aonung para cargarla.
- Estoy aquí – dijo Ronal abriéndose paso entre los chicos – rápido, llévenla al marui. – ordenó poniéndose en camino.
- ¡Abran paso! – exclamó Jake a la gente mientras llevaba a la chica al marui donde sería revisada.
