🧡CAPITULO 6🧡

494 55 74
                                    

Después de pasar por el hospital donde atendieron a todos y cada uno de los heridos, tocaba la difícil tarea de procesar a los involucrados, Volkov acompañó a Horacio mientras el médico cerraba de nuevo la herida de su brazo.

El cadete cada vez iba siendo más consciente de dónde estaba, no recordaba bien lo que había pasado pero mientras más sereno se encontraba, peor se sentía al observar el rostro serio del peliplata quien no dijo ni una sola palabra en todo ese rato.

Conway junto al cadete de servicio llevaron a unos cuantos detenidos hasta comisaria en dos patrullas, al volver quedaban solo Greco y Horacio quienes no querían ser llevado a los calabozos, el ruso tuvo que esposarlos, no quería pero el superintendente había dejado claro que debía hacerlo muy a su pesar.

Greco se reía pensando en que era una broma de mal gusto, Horacio se mantenía cabizbajo mientras que Volkov los llevaba hasta el patrulla donde los esperaba su jefe,- muy bien, ¿ya están todos?,- el ruso asintió metiéndose en el asiento del copiloto una vez dejó a sus compañeros en los asientos de atrás,- ¿os gusta actuar como delincuentes?, pues sereis tratados como delincuentes,- la voz del mayor de todos sonó potente dentro de ese vehículo.

-Venga Conway, ¿en serio vas a detenernos?,- el de barba no daba crédito.

-Leéle los derechos,- ordenó recibiendo una mirada fria por parte del de tez pálida.

-Conway no hace falta que...-

-¡Leéle los putos derechos!,- gritó mirando al frente.

Volkov procedió negando con su cabeza, por una parte entendía el cabreo de su jefe, asistir a una alerta donde algunos de tus agentes están involucrados no era lo normal pero, no creyó tener que llegar hasta este punto.

Llegaron a Mission Row, ambos bajaron a sus compañeros llevándolos hasta la pared del parking para cachearlos,- no jodas viejo, no tengo nada...soy tu puta mano derecha,- escupió Greco harto de ese show.

-Cierra el pico, vas a ser tratado como los demás por gilipollas, a ver si así aprendes a no juntarte con el payaso de Gustabín,- cacheó a su agente por encima antes de dirigirse con él escaleras abajo hasta las celdas.

-Lo siento...- la voz rota de Horacio hizo que el pecho del peliplata doliera.

-La habeis cagado, él no va a dejar pasar esto,- acarició con ternura su cabello mirándolo con su rostro reflejando su decepción.

-Lo sé, no me importa cumplir la condena que me ponga pero no quiero perder mi trabajo, por favor haz algo...-

El ruso no sabía dónde meterse, le dolía mucho ver a Horacio así pero ellos se lo habían buscado, intentó darle consuelo paseando sus manos por sus brazos, el joven aún esposado dejó caer una lágrima que el mayor limpió dejando un beso en su mejilla después,- anda vamos.-

Bajaron hasta las celdas, varios sujetos gritaban soltando improperios a Conway, Volkov paseó su mirada por allí buscando un lugar libre donde dejar al cadete quien estaba visiblemente asustado,- mételo aquí con el otro idiota,- el mayor hizo un gesto con la mano señalándole la celda de Greco.

-Conway, ¿en serio los vas a encerrar?,- su mirada suplicante rogando porque los dejara libres.

-Mételo ya y lárgate de aquí,- hizo lo que se le ordenó saliendo de allí furioso con su jefe, con Greco y con Horacio, no entendía como las cosas habían llegado hasta este punto, la frustración haciendo que todos los músculos de su cuerpo se tensaran.

----‐----------‐----

-¿No va a venir?,- el de cresta había pasado esas últimas horas pegado a los barrotes mirando a la puerta esperando por ver a Volkov bajar a buscarlo.

SE ALQUILA...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora