Ha pasado un mes desde que Sky nos dejó. Todavía no me lo puedo creer. Parece que todo ha sido un sueño, que cada mañana que me levanto, ella va ha estar ahí.
Echo de menos su risa, sus abrazos y cuando jugaba con ella. Me siento culpable por todas las veces que no la hice caso, por todo el tiempo que perdí al no estar con ella. Me quedan muchos recuerdos bonitos, como cuando fuimos al parque de atracciones, viendo sus series con ella y cuando venía a despertarme por las mañanas y se abalanzaba encima de mí. Mi madre es seguramente la que lo lleva peor de todos. No hay día en el que no la escuche llorar en la habitación de Sky. Se encierra allí y no sale en dos horas.
He quedado para ir a un recital de poesía con Aria. No le gusta mucho la poesía, pero me ha dicho que me quería acompañar. Si lo piensas bien, Aria y yo somos muy diferentes. Ella es muy abierta y yo soy muy tímido. A ella le encanta bailar, y yo ni si quera se dar dos pasos sin caerme. Me encanta la poesía, y a ella no. Somos como el agua y el aceite. Como el perro y el gato. Pero hace que seamos la combinación perfecta. Nos queremos a pesar de todo. Cada uno acepta todo lo del otro, y eso es muy importante. La quiero y nunca la voy a dejar.
Estamos sentados donde el recital. Está apunto de terminar. Sube el último chico rubio al escenario y comienza a hablar.
-El poema se llama "La reina"
Yo te he nombrado reina.
Hay más altas que tú, más altas.
Hay más bellas que tú, hay más bellas.
Pero tú eres la reina.
Cuando vas por las calles
Nadie te reconoce.
Nadie ve tu corona de cristal, nadie mira
La alfombra de oro rojo
Que pisas por donde pasas,
La alfombra que no existe.
Y cuando asomas
Suenan todos los ríos
En mi cuerpo, sacuden
El cielo las campanas,
Y un himno llena el mundo.
Solo tú y yo,
Solo tú y yo, amor mío,
Lo escuchamos.
Todo el mundo aplaude y se empieza a marchar.
-¿Te ha gustado?
-Para ser la primera vez, no ha estado mal.
-El último poema era precioso. Me ha recordado a ti.
-Ohh que bonito. Tengo una cosa que darte.
-¿Me as comprado algo?
-El otro día cuando salimos dijiste que lo querías, pero que todavía no te lo ibas a comprar. Que tenías que ahorrar. Entonces te lo he comprado yo.
Me da un paquete y comienzo a abrirlo. Sacó el regalo y veo que es "X" el disco de Ed Sheeran. Me quedo mirándolo con la boca abierta. La miro y tiene una sonrisa de oreja a oreja. La cojo en brazos y le doy un beso. Nos acabamos riendo y la dejo en el suelo.
-¿Te gusta?
-Me encanta. Muchísimas gracias.
-Ha merecido la pena por verte sonreír.
Me doy cuenta de porque lo dice. Desde que murió Sky, no había vuelto a sonreír, no había vuelto a reír. Agacho la cabeza e intento quitarme esto de la cabeza. Miro a Aria y se da cuenta de que no tendría que haber dicho eso. La cojo de la mano y reanudamos el camino.
-Siento haber dicho eso.
-No pasa nada. Tienes razón. He estado deprimido desde que pasó, y he tomado la culpa con todos. Eres la mejor novia de todo el mundo, no te preocupes por lo que has dicho.
-Es que ahora me siento muy mal.
-Tranquila.
Pasaron unos minutos en silencio que a mí me parecieron horas, hasta que por fin hablé.
-Es pronto, son solo las seis y media. Quieres venir a casa a ver una peli?
-Vale.
Estuvimos viendo "Divergente", estaba abrazada a mí y se quedó dormida. Vi como dormía y estaba preciosa. Le caían mechones de pelo por la cara. Al final, me acabé durmiendo yo también. Había sido un día muy largo y estaba muy cansado.
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Life's Dance
Teen FictionDylan, un chico como otro cualquiera, vive su vida normal hasta que se muda desde Los Ángeles hasta Madrid. Lo que no sabe, es que un día como otro cualquiera, su vida se derrumbará y no querrá volver a sentir nada. #wattys2015