Capitulo ocho

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La noche llego y Merlina se terminaba de alistar para ir a la biblioteca.

- ¿A donde vas?- pregunto la rubia.

- Tengo que hacer unas cosas con Rowan, vuelvo en una hora o más.

- ¿Que tipo de cosas?- pregunto la rubia

- Nada importante, Dedos se quedará contigo.

La mano apareció alado de Enid.

- Nos vemos.- Se despidió Merlina y salió de la habitación.

Rowan no se encontraba pero aún así entro a la biblioteca, después de observarla una bolsa negra tapó su rostro y se desmayó.
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Retiraron la bolsa de su cabeza y Merlina ya se encontraba atada.

"Estos y su misterio. Deben aprender a secuestrar mejor a la gente."

- ¿Quien se atreve a profanar nuestro santuario?- habló Bianca.

- Ya quítate la máscara Bianca- dijo Merlina mientras discretamente se soltaba de la soga.

Los jóvenes se quitaron sus capas y máscaras.

Rowan se encontraba entre ellos.

- ¿Como entraste?- pregunto Xavier.

- Mi madre era una obscurista, se todo sobre esto, y también es fácil descifrar el acertijo de la estatua.-mintió en la parte sobre que ya sabía gracias a su madre.

- ¿Acertijo? Pensé que solo chasqueábamos.-el grupo nego mientras rodaban los ojos.

- Se nota que es el listo del grupo- dijo Merlina sarcásticamente.

- La noche obscura es un club de elite, Merlina.- dijo Bianca- énfasis en "elite".

- No me interesa estar en su club de adolescentes "rebeldes"- dijo con un tono ácido.- Yo venía por ti- dijo mirando a Rowan.

- Pensé que te había expulsado de los obscurista.- hablo Ajax.

- Tengo trucos bajo la manga, aparte es cierto: necesito hablar con Merlina.

Bianca soltó un suspiro.

- Desátala- le ordenó a Xavier.

- Me desate desde de que se quitaron la máscara, idiotas.- se levantó de la silla y le dio la soga a Xavier- por personas como ustedes los secuestros tienen mala fama.

Rowan rie mientras sigue subiendo las escaleras.

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- Ahora, ¿Que fue lo que encontraste?- pregunto Merlina.

- No muchas cosas, suéteres viejos, ropa... pero esto te va interesar- mostró un libro- el diario de mi madre.

Merlina tocó el diario y rápidamente una visión la invadió.

-¡Debes calmarte!- exclamo un hombre, este era alto y algo apuesto- ¿que fue lo que viste?

Another chance- wenclairDonde viven las historias. Descúbrelo ahora