UN AMOR DE OTRO MUNDO (DAEMON TARGARYEN Y T/N)

CAPÍTULO 6

POV. DAEMON

La pequeña venganza de T/n me dejó sensible la mejor de mis zonas, no pude ni desayunar decentemente, se fue con rapidez y no alcancé hacer nada, miré a mi alrededor y tomé el cuchillo de la cocina, lo observé detenidamente.

- Nada es igual a Westeros – suspiré y lo guardé en uno de los bolsillos-

Miré las fotos de esta chica, era bella, ruda, feroz y eso me hacía perder la cabeza, por las noches recordaba a Rhaenyra, sin duda su recuerdo siempre vivirá conmigo, pero T/n... es tan diferente, no puedo evitar no sentir atracción cuando la veo, aun así no puedo tenerla, debo buscar la forma de regresar a mi hogar, no entiendo que es lo que ha pasado, después de la caída pensé que estaría muerto, aunque posiblemente quien ha muerto es Aemond o puede que esté cerca atrapado en este lugar

La frustración me estaba invadiendo, ella no llegó así que tuve que salir a buscar comida, en la habitación donde me estaba quedando encontré más de esa ropa extraña, no pensaba caminar, pero no había opción, ese aparato con ruedas no sabía cómo funcionaba.

Caminé por los alrededores del campo, un fuerte ruido salió de la carretera, me detuve al ver que era el hombre con el que ella estaba la noche de ayer.

- ¡Hey! ¿Eres el amigo de T/n? voy al pueblo ¿Te llevo?

Me quedé sin expresión alguna, pero me sorprendió que quisiera llevarme sin conocerme, estaba preparado para todo, cualquier movimiento en falso y le rebano la nariz.

- Claro – suspiré-

El camino al principio fue algo silencioso, de verdad que lo prefería así, comenzó hablando sobre él, que era actor o algo así, no entendía bien a que se refería, la conversación fue un poco más interesante cuando comenzó a platicar sobre ella.

- Supongo que la conoces desde hace tiempo – sonríe- ella no dejaría que alguien se quedará en su casa, tiene mucho tiempo sola, pero supongo que lo sabes.

Este hombre hablaba y hablaba sin dejarme responder, aunque de alguna forma lo agradecía, había cosas que yo no conocía de ella, en realidad, no conozco nada de ella, no es como si realmente me importara.

- Me alegra de que estés viviendo con ella, es como una hermana casi casi, su abuela era una excelente cocinera y siempre nos llevaba comida a mí y a mí hermano, cada vez que veníamos a la casa de verano.

- ¿Casi hermanos? – susurro con confusión-

¿También se casaran entre ellos? Tomé con fuerza el cuchillo que llevaba en los pantalones. No, no pueden tener nuestras mismas tradiciones, reí a lo bajo y él me sonrío.

- ¿Sabes? Me caes bien – dice mientras gira hacía a mí- ven a cenar con nosotros hoy en la noche.

- No sé si eso sea posible.

- ¡Vamos! T/n estará ahí, o al menos eso espero, mi hermano dijo que se encargaría de llevarla.

- ¿Qué relación tiene tú hermano con t/n? – menciono sin verlo a la cara-

- Ninguna, que yo sepa, son muy buenos amigos, todos nos vemos como hermanos – sonríe-

Por fin habíamos llegado al pueblo, compré muchas cosas ya que el amigo de ella se ofreció a pagar, creo que comienza a ser agradable, me mostró muchas cosas del lugar, me observaba detenidamente y eso me hizo encender mis alarmas.

- ¿Sucede algo? – le miré fijamente-

- No – ríe- ahora veo para quien era la ropa – coloca su brazo sobre mi hombro y eso me hizo sentir un poco incómodo- solo no la lastimes

No entendí a qué se refería, tomamos nuestras cosas y después de invitarme una cerveza que no sabía nada parecida a las de Westeros, subimos al auto de nuevo.

- Tengo una idea – sonríe- no le diremos a nadie que iras, prepara una sorpresa para ella en su casa y después llegas – sonríe orgulloso-

- No entiendo – lo mire confundido-

- Hazlo – golpea mi hombro y lo miro con disgusto-

Seguimos nuestro recorrido, me dejó en la casa y se fue. Entré, efectivamente no estaba, troné mi cuello un par de veces, pensaba si ir o no. El tiempo estaba pasando y ella no llegaba, no es como si me importara ¿O sí?

Suspiré, y ya decidido pensé en tomar prestado su caballo, salí y vi a mí futuro transporte, lo acaricié un poco antes de pensar en montarlo, sentí como cedió conmigo y sonreí.

- Buen chico – sonreí-

Monté rápidamente hasta la casa de mi nuevo aliado, al llegar pasé junto a los establos, me pareció escuchar un ruido extraño, me asomé y la vi ¿Pero quién era él?

Su mirada perdida y sus gritos no eran nada sutiles, al verla de esa manera la sensación de quererla tener aumento mucho más, me distraje un momento cuando sus ojos miraron los míos, no tenía que ocultarme, yo lo estaba disfrutando, verla tan expuesta, su cuerpo, su voz... la sonrisa que lanzó al verme, ella provocaba cosas en mí, me confunde y me aterra su atrevimiento, el sonido de sus jadeos y embestidas eran más fuertes, miré hasta el momento que soltó su último orgasmo. Estaba decidido, si quiere jugar, podemos hacerlo.

Caminé dentro de la casa, dejé a Bojack el caballo de T/n en el establo, justo antes de entrar el amigo de ella me vio.

- ¡Has llegado! – sonríe-

- Tarde un poco con... la sorpresa – sonreí-

- Bien hecho, pasa, que fueron a recorrer la casa, no tardan – sonríe- ¿Cerveza?

- Claro – sonreí-

Momentos después entraron, ella al verme se sorprendió un poco, tal vez no entendía que hacía en la casa de su amigo o creyó que me iría al ver aquella escena.

- ¿Qué haces aquí? – menciona al verme-

No respondí, me levanté hasta estar cerca de ella, coloqué una de mis manos en su cintura y la apreté a mi cuerpo.

- He venido por ti – la miré fijamente, sonreí al ver su cara de confusión, tomé con una de mis manos su mejilla y la bese con posesión- Es hora de irnos.