UN AMOR DE OTRO MUNDO (DAEMON TARGARYEN Y T/N)

CAPÍTULO 8

Han pasado ya dos meses desde aquella noche, Daemon se comportaba extraño, después de lo sucedido no me ha vuelto a tocar, a veces parecía que trataba de evitarme, iba y venía seguido, no desayunaba ni comía en casa, me estaba volviendo loca.

No debería de importarme lo que esté pasando con él... es verdad que la pasamos bien ese día, pero no entiendo, me dijo que no podría estar con nadie más y siendo sincera creo que eso me ha afectado.

No me agrada, no en absoluto, pero tampoco puedo estar lejos de él por mucho tiempo, me sentía inquieta cuando él salía, cuando llegaba y me miraba con su más tenso rostro.

Daemon me confundía cada día más, no se portaba como antes, pero ahora era muy distante, miraba sus ganas de tocarme, pero no cedía y yo no hacía el intento.

Miré alrededor de la casa, estaba sentada tomando una taza de café, suspiraba al ver el plato que había servido para él, según sé estaba tomando una ducha. Al escuchar el sonido de un motor miré por la ventana, era Liam, sonrió al verme y a paso lento se acercaba a la casa.

Decidí salir antes de que entrara, tomé mi taza de café, al salir por la puerta vi cuando se detuvo para acariciar a Bojack.

- Creo que le caigo mejor yo que tú – ríe mientras acaricia su pelaje-

- Estoy segura que hay alguien que le cae mejor que tu – sonrío al recordar el acercamiento de Bojack y Daemon-

- No lo creo – ríe-

- ¿Qué te trae por acá? – sonrío-

- Vine para ver si alguien quería ir a recorrer el campo conmigo – levanta ambas cejas-

- Suerte encontrando a ese alguien – reí tomando sorbo de café-

- Sé que sabes que hablo de ti – sonríe y coloca su brazo alrededor de mis hombros-

- ¿En serio? – pregunté confundida-

- Deja de hacerte la tonta – pica mis costillas- vamos – sonríe-

- No creo que sea buena idea – suspiro- hoy no me apetece ir a caballo.

- ¿Qué? – me mira sorprendido-

- Lo que has escuchado – sorbo café- además no tarda en llegar el invierno, no quiero tener un accidente.

- Por favor – voltea los ojos- eres excelente cabalgando – lo último lo dice con voz ronca-

- No estoy de ánimos – estiro mis brazos-

- Solo acompáñame, yo montaré – me abraza por la espalda-

La cercanía de Liam rara vez me hacía sentir incomoda, no lo miraba seguido, así que decidí acompañarlo.

- Está bien – suspiro- pero que sea en tu caballo.

Sabía que a Daemon le gustaba salir con Bojack, prácticamente era su medio de transporte... y no es como que a mi querido semental le molestará, parece ser que el dueño de este era él.

- Claro, dejo la camioneta y traigo a Merlín – sonríe-

- Perfecto. – asentí-

Liam entró a su camionera y se fue, subí a mi habitación rápidamente para colocarme la ropa adecuada para montar, escuché ruido cerca de mi habitación pero no presté atención, me desvestí quedando en ropa interior, planché lo que se tenía que planchar y ya estaba dispuesta a cambiarme.

- ¿Vas a salir? – entró y cerró la puerta-

- Daemon... – lo miro sorprendida-

Se acercó lentamente a mi lado, colocó sus manos en mis caderas y besó mi cuello, una de sus manos tocó mi seno por encima de mi ropa interior.

- ¿A dónde crees que vas? – me mira con una sonrisa de lado-

- Iré a montar con Liam – menciono con seguridad- si me permites... me estoy vistiendo.

- Te permito lo que quieras – sonríe-

- Entonces sal.

- Lo haré, pero antes... - silencio-

Pasó su mano por mi cintura bajando hasta mi glúteo, reventó mis bragas con su otra mano, quedando expuesta para él.

- Tengo que asegurarme de que te portes bien – besa mi cuello-

Me recargó en la pared y metió sus dedos en mi centro, frenéticamente mueve su mano dentro de mí provocando que suenen mis gemidos, el calor se concentraba en mi estómago, la excitación me hacía sentirme tan ligera que podría volar si quisiera.

Sus dedos apretaron mi clítoris y solté un golpe en su pecho, la explosión de emociones me embriagaban.

- Maldición, te odio – jadee mientras sus dedos continuaban con su tarea-

- Sé que estás mintiendo – sonríe-

Sus dedos seguían dentro de mí, su boca mordía mis senos por encima de mi sostén, lo hizo a un lado exponiendo uno de ellos, lamio y chupo hasta que quedo rojo, sus manos volvían a moverse, mordió mi cuello tan fuerte que dolía, con sus dedos apretó nuevamente mi clítoris y solté un gran gemido.

- Ahora si puedes terminar de vestirte – deja un corto beso en mis labios y se va-

- Ese hombre va a volverme loca – suspiré cayendo lentamente al suelo, mis piernas tardaron en responder-

Terminé de vestirme y salí al establo, no estaba Bojack, pero si Merlín y Liam, sonreía mientras bajaba.

- ¿Lista?

- Claro – asiento-

Paseamos más o menos por unas dos horas, nos quedamos junto al lago mientras platicamos, me contaba anécdotas sobre su vida en la ciudad, me reí al recordarle que hace apenas unos meses vivía allá.

Trató de tomar mi mano varias veces, pero me hice la tonta y caminaba por delante, el tiempo estaba pasando y yo moría de hambre, propuso que fuéramos a su casa, pero no creí que fuera buena idea, después de pedirlo varias veces opto por dejarme en mi casa.

El camino fue rápido, siempre disfrutaba cuando el aire pasaba tras mi cabello, respirar la pureza de los arboles me encantaba, llegamos a la casa y reímos por sus tonterías, siempre ha sido muy tonto y gracioso.

- Sana y salva

- Gracias – sonreí-

- T/n... - me mira fijamente-

- Creo que voy a entrar – me despido caminando hasta adentro- nos vemos después.

Entré y solté un gran suspiro, coloqué mi sombrero en la mesa y sentí una mano cerca de mi cuello.

- ¿Cómo te has portado? – sonríe de lado-