mother tongue

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Hanma, junto con Baji y Kazutora, se encontraban sentado en la mesa de la sala de juntas en espera de que Akihiko llegara. Después de unos días Hanma se había asegurado de mandar un claro aviso a este que quería hablar con él, y más que hablar era dejar una clara advertencia.

Baji le había dicho que estaba loco por lo que estaba por hacer, incluso Kazutora se había visto un poco molesto ante el cambio de planes que había dicho Hanma, pero ya que lo había pensado detenidamente, era aún mejor para ellos que sucediera tal y como el de mechón rubio había propuesto.

La puerta de entrada fue abierta teniendo en primer plano la entrada de Akihiko junto a sus abogados. Hanma se levantó, con una seria mirada que de primer vistazo denotaba lo que sentía en esos instantes y lo que estaba conteniendo.

─ Bienvenido, toma asiento. ─

El de mayor edad acató a las palabras del más joven, siendo así que el resto de sus hombres también tomaron asiento a su alrededor, quedando frente a frente todos y cada uno de ellos.

─ ¿Tienes algo que decir antes de obviar a lo que venimos? ─ Preguntó Hanma.

En ese momento esperaba una mínima de vergüenza por parte de Akihiko, aunque fuera una disculpa forzada, pero claramente eso nunca estuvo presente: sólo obtuvo un rodar de ojos de aquél hombre mayor. Hanma mostró una mueca de fastidio, pero no se dejaría llevar por las emociones que aquél alfa le hacía emanar.

─ Como quieras. Kisaki no está solo, y después de que te atrevieras a ir hasta mi casa a causar molestias y sobre todo a alzarle la mano a mi pareja, no creas que voy a dejar que pase todo como sea. ─

De pronto, una risa se hizo notar en el ambiente: una vez más era el progenitor del moreno, quien se cubría aquella risa con el dorso de la mano, haciendo que la sangre le hirviera en rabia a Hanma y al ser tan notorio Baji le colocó una mano sobre el hombro, en clara señal de que debía aguantar y no dejarse provocar.

─ ¿Y qué quieres que haga, según tú? ─

─ Dejarle totalmente y de una buena vez por todas las propiedades a Kisaki como un reparo a todo lo que haz hecho. ─

Akihiko no era tan idiota. En una señal hablo con uno de sus abogados mismo que sacó del portafolio el contrato que unos meses atrás habían firmado en conformidad.

─ Kisaki tendrá todo lo que quiera, pero por si no lo recuerdas o quizá no sabes leer, el contrato marca que eso sucederá cuando yo esté en un ataúd bajo la tierra, en mientras la mitad es mía aún. ─

En ese instante Baji se levantó, pidiéndole a Hanma que le dejara aquello a cargo y tomara asiento. El alfa obedeció: dejaría eso en manos de su brillante amigo. Baji, enseguida que el alfa recesivo terminó de hablar, sacó su portatil, buscando así la serie de archivos que había preparado de manera apresurada en una semana.

─ Lo sabemos. La tercera cláusula en el parrafo décimo de la sección dos sobre los acuerdos mutuos lo marca. ─ En ese instante Baji se quedó callado un momento.

Buscó un poco más en sus archivos hasta dar con lo que quería, que era la única y mejor arma que tenían en ese momento y que obtuvieron gracias a la sobreprotección de Hanma.

Ajustándose los lentes y volteando la portátil corrió justamente el vídeo, mismo que mostraba todo lo ocurrido con Akihiko gracias a la cámara de la entrada que tenían y a una serie de cámaras que Hanma había hecho instalar en la recámara, videos que mostraban con lujo de detalle lo ocurrido aquél día.

Akihiko no podía creer que había sido tan descuidado después de tantos años de poder salirse con la suya, ahora en ese instante quedaba como un imbécil sólo por unas simples cámaras. Mientras los contrarios observaban Baji continuó hablando.

Troublemaker. © ( HanmaxKisaki | Omegaverse )Donde viven las historias. Descúbrelo ahora