Encuentro inesperado

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Han pasado ya 5 días desde la fiesta en la casa de los Ferrari. Últimamente no sé que me ocurre. Sólo me sucede cuando estoy con Chris, cada vez que nos besamos, siento que no volveré tener el control de mi mismo. Por eso he decidido mantenerme un poco distante; evitar los momentos a solas.

Falta poco para que él se presente en el evento de caridad de la secundaria, y a decir verdad, me preocupa mucho el hecho de que esté pasando mucho tiempo con mi hermana... Lo peor de todo es que ni siquiera lo he podido escuchar en los ensayos porque dice que le da pena y que prefiere que lo dejemos todo para ese día.

-Y entonces lo estás evitando. -Mencionó Alexis como si fuera irrelevante.- Yo pienso que deberías de... de sacar ya la pizza del horno.

-Alexis! .- Lo alejé antes de que pudiera abrir el horno.- por enésima vez, ya te dije que aún no está lista!

-Bueno ya!- Se apartó más y comenzó a gritar.- Entonces alejémonos de la maldita cocina porque si continúo aquí soy capaz de arrancarte un brazo y comérmelo.

-Ves! .- Comencé a gritarle. - Ni siquiera me estás poniendo atención! Sabía que no era buena idea venir para pedirte un consejo.

Una vez que salimos de la cocina, nos dirigimos hasta el cuarto de Fer. Cuando llegamos, le pedimos amablemente que se encargara de sacar la pizza del horno en 15 minutos mientras que nosotros lo esperábamos en la habitación del mayor.
Ya adentro, ambos nos pusimos cómodos en los sillones que se encontraban dentro.
No pasaron ni 5 minutos cuando alguien intentó abrir la puerta.

-Te dijimos que en 15 minutos idiota!. -Mencioné abriendo la puerta.

-Perdón? - Contestó Anna Karen entrando con varias bolsas de ropa -Tú que haces aquí marica?

-Perdón? -Fruncí al ceño al escuchar semejante estupidez.

-Si alguien se enterase de que eres un homosexual de mierda la popularidad de mi novio se esfumaría... Así que vete antes de que todos se enteren y arrastres a las sombras a mi chico.

-Amor! -Se levantó el ojiazul cuando vio que su novia me estaba sacando a empujones del cuarto. - Es mi amigo, respétalo sí?

-¿Cómo me puedes pedir eso? Por favor Alexis! Ya empieza a comportarte como hombre. -Se apresuró a decir Anna con la sonrisa más hipócrita que hubiera visto jamás.- ¿Qué no te importa que todos te dejen de hablar por culpa de éste adefesio?

-Pues si me dejan de hablar me darían a entender que no son verdaderos amigos.

-¿Amigos?... Madura Alexis por Dios!!. -Anna me tomó del brazo y condujo hasta la puerta de la habitación. -Y tú, ya ándate! que seguro el marica de tu novio te ha de estar buscando.

-Anna!!!

-No Alexis. -Lo interrumpí. - Ya déjala... ella tiene razón. -Me solté de su agarré bruscamente y salí dejando todas mis cosas.

Lleno de rabia decidí irme nuevamente hasta la cocina para estar con Fer. Recorrí una vez más los pasillos lujosos de la mansión, pero cuando llegué por alguna extraña razón no lo encontré.
Por suerte apenas era tiempo de sacar la pizza del horno. Con toda la tranquilidad del mundo, y como si de mi casa se tratase, acomodé el comedor y coloqué un par de sodas y platos para que cuando Fer regresara pudiéramos comer tranquilamente.

El tiempo pasaba y el menor no aparecía. Como nunca me ha gustado comer solo decidí ir hasta su cuarto para buscarlo pero tampoco lo encontré. Ya estaba un poco desesperado buscándolo por todas las habitaciones hasta que lo vi afuera de la casa sentado junto al buzón.

Salí dejando la puerta abierta y me senté junto a él, como no se daba cuenta de mi presencia tosí un poco.

-Oh joder! lo siento he olvidado sacar la pizza del horno. -Dijo un poco alterado.

Me enamoré de mi mejor amigo (Gay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora