Capítulo 13 - La Orden

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NARRADOR OMNISCIENTE

Tras el ruido de las explosiones, la orquesta dejando de tocar y los gritos de la multitud aterrada, todos los que habían entrado con el supuesto ataúd de Jarvan, salían del palacio para ver qué sucedía. La gente aún gritaba de horror por los soldados ensangrentados y sin vida, con espadas atoradas hasta el cogote, pero nada les preocupaba tanto como la desaparición de Lux.

La multitud gritaba el nombre de la chica dorada y decían que estaba ahí, que pudo haber muerto pero que no había sido así, ya que se la habían llevado una banda de encapuchados. La pareja Crownguard observaban muy molestos a los sabios; sin embargo, se mantuvieron al margen de la situación, pues al estar en público y al encarar a los sabios probablemente tendrían un conflicto de intereses que no estaban dispuestos a afrontar; conversaron un poco entre ellos y calmaron su conciencia al decir que Lux se había ganado eso a pulso por desobediente y rebelde, y que ojalá fuera más como su hermano mayor, quién sí era todo un ejemplo.

Mientras tanto, Garen no emanaba una sola expresión y Xin Zhao por su parte, estaba muy preocupado y salió corriendo de ahí, en búsqueda de Lux. Claro, no sin antes discutir con Garen.
-¿A dónde carajo vas?- dijo Garen, molesto por la actitud de su compañero.
-A buscar a Luxanna, idiota- decía Xin a Zhao, intentado conectar los puntos y descubrir quién se había llevado a su compañera de toda la vida.
-No tienes autorización para irte, estamos aquí por Jarvan, cuando terminemos podrás ir a buscarla.
-¿Tan poco te importa tu propia hermana? ¿Cómo mierda puedes ser tan miserable?- Xin Zhao se quedó observando de pies a cabeza a Garen, llevaba todas sus medallas colgadas en el pecho y las reconocía a todas, a excepción de una, que llevaba una rosa medianamente marchitada y Garen al percatarse de su mirada, la ocultó de inmediato entre las demás.
-No ha pasado mucho tiempo, no pudieron ir tan lejos. Vuelve a la ceremonia, limpiemos este desastre y actuemos como si nada pasara. Si sigue cundiendo el pánico de ésta forma, estaremos haciendo más misiones de las que tanto te quejas y tanto odias. Luxanna tiene que aprender su lección, volverá tarde o temprano a casa y volverá a desafiar a todos creyendo que lo que hace está bien, hasta que de alguna forma deje de tener esos arranques tan estúpidos y finalmente madure. -respondió Garen agresivamente, mientras tomaba al otro demaciano por el brazo y apretaba su agarre.
-El que necesita madurar es otro. Tú hiciste pública la desaparición de Jarvan cuando estábamos en la frontera porque ninguno de nosotros te hacía caso y creíste que así las cosas irían a tu favor-.
-Agh. Eso solo ocurrió en tu mente esquizofrénica- interrumpió Garen.
-Intentaste asesinar a Katarina y no solo fracasaste rotundamente, sino que casi te matan de no ser porque tu pequeña hermanita te salvó el culo. De no ser por Lux probablemente tu sangre seguiría escurriendo de las dagas de Du Couteau, actuaste como un mocoso caprichoso y nos humillaste a todos en la frontera, pero de alguna forma crees que quién tiene que madurar es Luxanna. Eres un completo pendejo, y uno muy ridículo por cierto-.
-Oh sí, también secuestré a Lux aunque estábamos allá dentro, juntos. -respondió de forma cínica, siendo segundos después empujado por Xin Zhao, quién salió del castillo tan rápido como pudo, para ir en búsqueda de su caballo e idear un plan de rescate para Lux, aunque aún no tuviera ni idea sobre de quién debía rescatarla, o sí realmente debía rescatarla.

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Desperté con los ojos vendados y mi cuerpo atado a algo de madera. Mis pies no tocaban el suelo y mis muñecas ardían, también estaban atadas, rodeando alguna superficie circular pero no podía descifrar qué era; mis piernas estaban entumecidas, quizá por el tiempo que llevo aquí colgada y solo escuchaba una extraña voz mística cantar.

Cortaron la superficie a la que estaba sujeta y caí directamente al suelo, haciendo que aterrizara en parte con mi rostro y se raspara,  mi mentón y mi barbilla se habían rajado y me ardían bastante. Intenté levantarme, pero me fue imposible. Mi cuerpo estaba muy debilitado y el entumecimiento de mi tren inferior no era de gran ayuda.

Entre el amor y la lealtad - Katarina x Lux (LoL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora