Luna Sangrienta |Bakudeku-Katsudeku|

XII

Decir que no le dolió el que su mejor amiga no creyera en él, sería una gran y terrible mentira.

Pero es consiente que es extraño que siempre ha podido ver lo que otros no.

Aún más extraño el que no ve nada más que eso. No es como si tuviera un poder de ver fantasmas o espíritus, pero sabe también que está en sus cinco sentidos.

Solo no se explica porqué puede verlo solamente a él.

Tal vez todos tengan razón y Kacchan sea solo una respuesta a su soledad y a la necesidad de ser comprendido, o quizá él tenga razón y Kacchan es un ente real y puede verlo porque quizá esté ligado a él de una u otra manera.

No lo sabe, pero sí sabe que el tema puede ser delicado y cansado de escuchar, de hablarlo, porque si su amiga y los demás están cansados de escucharlo por algunos años, Izuku está aún más cansado de vivirlo.

Creyó que todo esto había terminado el día en que pisó tierras norteamericanas y no lo vio más. Ahora que ha regresado, esto vuelve a ocurrir.

¿Tiene algo que ver el país donde vive? Quizá se lo está pensando mucho y solo sea casualidad, aún así, la felicidad que sentía hace un momento se esfumó al ponerse a dar vueltas una y otra vez sobre sus pensamientos y memorias.

Llega caminando a Yuuei, y todos se sorprenden al notar que no va al lado de la castaña.

-¿Ochako no vendrá hoy? -pregunta Mina desconcertada.

-Creo que vendrá más tarde... -se limita a contestar con una sonrisa que no engañó a nadie.

-¿Cómo estás bro? ¿A caso se pelearon o algo? -Kirishima se acercó con gran duda, mostrándose preocupado.

-No, no... Nada de eso, es solo que... En algunas ocasiones pensamos diferente, eso es todo.

-Entonces sí se pelearon. -Afirmó Mina.

-No una pelea realmente, es que... -se alborotó sus rizos, nervioso de si continuar hablando. -Si les cuento algo ¿Prometen no burlarse?

Tanto Kirishima cómo Mina conectaron miradas mostrando seriedad ante la conversación, volvieron a Izuku y ambos asintieron.

Izuku dudó unos segundos más y buscó las palabras adecuadas para iniciar.

-¿Recuerdan al chico que estuve buscando? -ambos asintieron. -Lo encontré.

-¡¿Hablas enserio?! -Mina saltó emocionada.

-¡Genial! ¿Cuándo lo conoceremos al fin?

-Pues... No es tan fácil como quisiera...

Ante la mirada de confusión que sus contrarios le entregaron, Izuku procedió a contarles toda la historia de "Kacchan", desde pequeño, cuando dejó de verlo, y lo que ocurrió hoy que ha vuelto.

Decir que ellos entendían a cabalidad sus palabras sería mentir, no sabría decir si era incredulidad, confusión, o miedo lo que sus rostros expresaban. Pero a Izuku eso no lo detuvo.

Quería desahogarse, y teniendo en cuenta lo que conocía en lo que ha pasado del año, confió en ellos.

Tal vez no le entendieran, aunque realmente sabe que quizá nadie lo haría, pero necesitaba sacarlo de sí.

-Vaya... De haber sabido que nunca lo encontraríamos, no habríamos hecho el ridículo siguiendo el plan de Mina y su obra de teatro falsa.

-¡Fue divertido! -se quejó dándole un fuerte golpe en las costillas. -Dejando eso de lado, lo que nos cuentas es muy...