Obsequio de cumpleaños

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Prólogo: Es el cumpleaños de Bucky.

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En honor a que hoy, 10 de marzo es el cumpleaños de nuestro querido James Bucky Barnes en el ucm, les traigo éste capítulo celebrando a nuestra Sargento favorito 💖
dpresston

Bucky estaba durmiendo de espaldas hacia ti con tan solo unos shorts de pijama puestos.

Te acercaste hacia él y lo abrazaste comenzando a dejar besos por su cuello y hombros, en especial donde el metal se unía con su piel mientras acariciabas su pecho descubierto.

Bucky soltó un pequeño suspiro comenzando a despertar, pero quedándose en su misma oposición mientras tú mano subía y bajaba en su pecho.

–Buenos días...–Susurraste en su oído dejando besos por la zona.

Bucky sonrió y tomó una de tus manos para besarla.

–Hola muñeca...–Respondió con la voz ronca al venir recién depertando.

–Feliz cumpleaños, Sargento Barnes.–Le dijiste provocando que riera ligeramente.–¿Qué se siente ser un año más viejo?

–Se siente como si fuera un pervertido por estar contigo.–Rió ligeramente volteándose para abrazarte y esconder su rostro entre tus pechos.

–No eres un pervertido, no seas ridículo. Soy mayor de edad.–Reíste acariciando su cabeza mientras él volvía a cerrar los ojos.–Además te ves más joven de lo que eres.

–Gracias por el cumplido.–Rió ligeramente dejando besos en tus pechos al tu estar sin playera, y de vez en cuando pequeñas mordidas.

–Sam te organizó una fiesta sorpresa... sé que no debería decírtelo pero también sé que no te gustan las sorpresas.–Le dijiste con una sonrisa, dejando un beso en su cabeza y pasando tu mano izquierda por su cuerpo.

–¿De verdad es necesario ir?–Te preguntó con su rostro hundido en tus pechos.

–Sam se esforzó por tu sorpresa, Buck. ¿De verdad no vas a ir? Además, sus sobrinos ayudaron a organizar la mayoría de las cosas.–Le dijiste pasando tu mano por su cabeza.

Bucky soltó un gruñido y te dio vuelta para recostarse encima de ti, dejando besos en tu cuello.

–Me estás chantajeando.–Te dijo mientras besaba tu cuello y su mano izquierda acariciaba tu pierna y otra tu pecho.

–¿Y está funcionando?

–Sí...–Rió ligeramente al igual que tú, alejándose para verte a la cara.–¿A qué hora es la fiesta?

–Sam me dijo que te llevara a las tres.

–Bien, entonces tenemos tiempo. ¿Puedo tener mi primer obsequio y el más importante ahora?–Te preguntó con una sonrisa y mordiendo su labio inferior, jugando con el borde de tus shorts de pijamas.

–Claro que puedes, pero las cosas van a ser diferentes hoy.–Le dijiste con una sonrisa provocando que frunciera el ceño confundido, antes de que le hicieras caer recostado en la cama y tu encima de él en su regazo, moviendo tus caderas encima suyo.–Eres el cumpleañero, así que déjame a mi hacerme cargo de ti. Tu solo relájate y disfruta.

Bucky solo sonrió dejando sus manos en tus caderas mientras te acercabas para besarlo.

(.....)

Más tarde llevaste a Bucky hasta la casa de la hermana de Sam donde se celebraría la fiesta, y todos los vecinos acudieron para celebrar al soldado.

Bucky se notaba que estaba muy feliz, y aún no podía creer cómo es que todos los niños habían hecho dibujos para obsequiarselos a él.

En un momento Bucky desapareció de la fiesta, y fuiste a buscarle para encontrarlo en el muelle viendo hacia el mar.

–Hey... ¿todo bien?–Le preguntaste con una sonrisa, acercándote para poner una mano en su espalda.

–Muñeca... si, tranquila. Solo necesitaba despejarme, es todo.–Te aseguró con una sonrisa, posando su mano en tú espalda y dejando un beso en tu cabeza.

–¿Qué te ha parecido tu cumpleaños?–Le preguntaste volteándote hacia él.

–El mejor que he tenido en años...–Te respondió con una gran sonrisa.–De verdad es anormal la cantidad de obsequios que he recibido hoy, y-y todo el cariño de la gente es... e-es increíble.

–Me alegro que lo estés disfrutando... pero aún falta mi obsequio.–Le dijiste con una sonrisa, sacando algo del bolsillo de tu chaqueta.

–¿Otro más? Muñeca haz sido la persona que más obsequios me ha dado.–Rió ligeramente volteándose hacia ti.

–Lo sé, pero éste es más importante que todos los anteriores.–Le dijiste con algo de nerviosismo.

Bucky frunció con ligereza el ceño sonriendo, y le entregaste una pequeña caja la cual tenía amarrado un listón rojo.

El soldado tomó la caja en sus manos y levantó la vista hacia ti confundido, antes de volver a ver el objeto en sus manos mientras tú jugabas con las tuyas nerviosa.

Bucky quitó el listón y se lo guardó en el bolsillo, para luego abrir la pequeña caja y encontrar un anillo.

El soldado quedó boquiabierto e inmediatamente levantó la vista hacia ti.

–¿Muñeca qué...?

–No quería darte esto frente a todos en caso de que dijeras que no, y también porque sé que te sentirías presionado. Además quería que fuera algo especial e íntimo entre los dos.–Le dijiste con una pequeña sonrisa, tomando la caja de sus manos para sacar el anillo y guardarla en el bolsillo.–Bucky... tu mejor que nadie sabes que no soy la mejor con las palabras, pero voy a intentarlo...

Yo te amo, más que a nada en el mundo, y haberte conocido fue lo mejor que me pudo haber pasado. Sé que hemos tenido nuestros momentos malos, como también hemos tenido momentos felices y hermosos como hoy... y-y realmente me encantaría poder pasar el resto de mi vida a tu lado si eso es lo que tu también quieres... por eso es que ahora te hago la pregunta... James Bucky Barnes... ¿quieres casarte conmigo?–Le preguntaste con nerviosismo, viéndole a los ojos con el anillo en tu mano.

–¿E-es enserio?–Preguntó soltando una pequeña risita y los ojos se le llenaban de lágrimas.

–Sí...–Respondiste nerviosa.

Bucky rió ligeramente y se acercó para abrazarte, escondiendo su rostro en tú cuello con lágrimas de felicidad corriendo por sus mejillas.

–Me encantaría casarme contigo, muñeca...–Rió alejándose para verte a la cara y besarte con fuerza.

Soltaste un suspiro de alivio en sus labios y acariciaste su mejilla, para después alejarte y poner el anillo en su mano.

–¿Si te queda bien?–Le preguntaste secando las lágrimas que corrían por tus mejillas.

–Es perfecto muñeca...–Te respondió tomando tú rostro con ambas manos.–Te amo como no tienes idea...

–Yo también te amo.–Le dijiste con una sonrisa antes de volver a besarle, dejando tus manos en su cabeza para pegarlo aún más a ti, ambos llorando de felicidad.

Bucky Barnes Oneshots IIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora