𝐂𝐚𝐩 𝟏𝟑

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Al día siguiente mamá me trajo la noticia de que ya podía salir

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Al día siguiente mamá me trajo la noticia de que ya podía salir. Apenas terminó de decirlo salí corriendo hacia la habitación de cinco, pero el no estaba allí.

De repente vi a Allison caminando en el pasillo.

-Allison —la llamé—

-¿Si? —volteó a verme—

-¿Haz visto a Cinco? —pregunté con la esperanza de que ella supiese donde se encontraba—

-Creo que estaba en la enfermería pero no estoy segura

-Gracias —dije rápidamente para ir a la enfermería—

Al llegar a este lugar vi al chico recostado sobre una camilla. El tenía sus ojos cerrados, hasta que escuchó mis pasos.

-Hola —dije cuando me vió—

-Saliste —respondió con una pequeña sonrisa—

-Al fin...ha sido la semana más larga de mi vida, está todo bien? —pregunté al recordar que estábamos en la enfermería—

-Estoy bien, solo es un chequeo —ladeó su cabeza—  lamento no haber ido por las noches, papá amenazó con dejarte más tiempo si lo hacía

-Descuida no pasa nada... —moví mi mano restándole importancia— lo bueno es que ya salí

-Asi es

Iba a mencionar allí que me contó Grace sobre la medicación, pero preferí no hacerlo.

-Oh, casi lo olvido! —dije llamando la atención de Cinco— ¿estarás ocupado este 1 de octubre?

-No que yo sepa —me miró— ¿por qué? —levantó la ceja—

-Bueno...—me balanceaba con mis pies— pensaba que podríamos salir a festejar nuestro cumpleaños —sonreí— ¿Que dices? Iba a decirle a nuestros hermanos también

-Estaré ahí donde sea que quieras ir —elevó las comisuras de sus labios—

-Iré a decirle a los demás —imité su gesto sonrisa—

Al salir, recorrí todas la habitaciones diciéndoles a cada uno de mis hermanos sobre la idea. Todos aceptaron salir el día de nuestro cumpleaños.

[...]

Finalmente había llegado el 1 de octubre, nuestro cumpleaños. Ya estábamos todos en la mesa, esperando a papá para desayunar.

Una vez que llegó, puso su cara seria de siempre y se sentó indicándonos que podíamos empezar a desayunar.

Era claro que no sabía ni que fecha era hoy, y si lo sabía, no le importaba o al menos eso parecía.

De igual modo, íbamos a festejar con mis hermanos saliendo a comer unas donas en la cafetería.

Apenas di dos bocados de mi desayuno cuando la alarma sonó en toda la academia. Misión.

Papá grito rápidamente que nos apuremos, que debíamos salvar al mundo. Corrí a mi habitación y me puse mi traje y mi antifaz.

Estaba por salir de mi cuarto cuando alguien toma mi mano.

-___... —pronunció Cinco mirándome a los ojos— ten cuidado —dijo con cierta preocupación—

-Descuida, tendré cuidado —sonreí y papá apareció diciéndome que vaya con el resto de mis hermanos— nos vemos pronto —sonreí nuevamente—

Cinco ya no podía entrenar, por consiguiente, no podía ir a misiones.

Subimos a una limusina, la cual nos llevó al museo de la ciudad, donde se estaba produciendo un robo.

Al llegar, nos dividimos en grupos. Luther y Diego por un lado, Klaus, Allison y yo por el otro.

Hacía levitar las cosas para arrojárselas a los ladrones. Allison hacía rumores, y Klaus, no podía ver donde se encontraba. De pronto vi a Klaus rodeado de dos hombres.

Corrí junto a Allison para ayudarlo, cuando de pronto mi cuerpo se encontraba en el piso.

Escuché un grito de Klaus y a lo lejos pude ver a Allison correr hacía mi. Mi vista se volvió nublada y no podía escuchar correctamente. Pronto todo se volvió negro.

[...]

-¿Qué pasó? —preguntó rápidamente Cinco a ver a sus hermanos entrar alterados—

-Cinco... —pronunció Klaus con los ojos un tanto llorosos—

-Klaus! ¿Que carajos pasa? ¿Y __? —dejó de hablar al ver a la chica inconsciente en los brazos de su hermano Luther—

Apúrate Luther llévala con mamá! —gritó Allison angustiada—

-¡¿Alguien me puede explicar qué pasó?! —gritaba Cinco alterado—

-Estaba detrás de mi cuando alguien le disparó—dijo Allison negando con su cabeza una y otra vez—

El corría detrás de Luther hasta llegar a la enfermería. Pero Grace le negó el paso.

-Mamá por favor déjame entrar —decía desesperado—

-Cariño no puedes entrar ahora —Grace insistía de forma apurada—

-Dime cuando esté por favor —le pidió Cinco con el corazón latiendo fuertemente—

-Lo haré—prometió Grace—

Cinco se sentó en el piso apoyando la espalda en la pared y llevando sus manos a su cara. Suspiraba fuertemente preocupado por perder a la chica.  Ya había perdido a su hermano, no podía perderla a ella también.

De pronto sintió una mano apoyándose en su hombro, elevó su cabeza mirando a su hermano Klaus devastado.

-Estará bien... —le aseguró, aunque parecía que quería convencerse a sí mismo de aquello—

Cinco se mantuvo en completo silencio mirando fijamente a la pared. Y su hermano copió su acción.

Luego de dos horas Klaus había caído en un profundo sueño sobre el hombro de Cinco. Este último no pensaba cerrar los ojos hasta asegurarse de que ___ esté bien.

El chico de ojos verdes se culpaba a si mismo de esto, aunque claramente el no tenía absolutamente nada que ver con lo que había pasado. Pensaba qué tal vez debería haber insistido de ir a la misión, tal vez así podría haberlo evitado.

Sus ojos comenzaron a humedecerse al ver que el tiempo pasaba y aun no había respuesta alguna.

Pronto la puerta de la enfermería se abrió, dejando ver a su madre. Él se levantó rápidamente haciendo que Klaus despertase.

-¿Cómo está? —preguntó rápidamente—

Grace se mantuvo unos segundo en silencio hasta que habló.

-Cinco, cariño...

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