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JM POV

Después del trabajo, Taehyung me llevo a casa. Yoon Gi salió con Jackson, por supuesto. Se estaban poniendo bastante serios, ellos habían estado pasando mucho últimamente conmigo ya que a Yoon Gi no le gustaba dejarme solo. Era viernes por la noche e insistí en que salieran y en realidad estaba deseando simplemente relajarme y ver un poco de televisión a solas. Había estado tratando de procesar toda la información que Taehyung compartió conmigo hoy en el trabajo y todavía estaba un poco atónito de que Jungkook estuviera soltero. Le creí porque parecía muy sincero, pero realmente me preguntaba en qué me había metido con esta familia.

El comentario de Taehyung acerca de ser amigo de Jungkook sin importar lo que supiera sobre él fue totalmente críptico. Quería estar allí para él y ayudarlo a pesar de lo que fuera que lo perseguía. Pero en algún momento iba a tener que abrirse a mí y dejarme entrar. Ya había demostrado que podía ser un buen amigo para mí y realmente quería hacer lo mismo por él.

Dejé estos pensamientos a un lado mientras abría el refrigerador buscando algo para comer. Observé las opciones patéticas en el interior y determiné que el chile vegetariano sobrante no era atractivo. Frustrado porque me había olvidado de ir a la tienda recientemente, comencé a buscar en el cajón de la cocina los menús para llevar.

Cinco minutos después, estaba revisando los números de mi teléfono buscando mi restaurante tailandés favorito cuando escuché un fuerte golpe en la puerta. Revisé el agujero de la mirilla y una vez más fui sorprendido por mi perfil favorito. Colocando mi mano en la perilla, respiré profundamente y traté de controlar la ridícula sonrisa en mi rostro. Estaba feliz de ver a Jungkook, especialmente porque estuvo fuera todo el día y extrañaba viajar a casa con él. El problema era que mi sonrisa era un poco más entusiasta de lo necesario y la creciente sensación en la boca del estómago era completamente inapropiada.

Abrí todas las cerraduras, sabiendo que Jungkook estaría escuchando para asegurarse de que tenía la puerta bien cerrada. Esa era una conversación que no quería tener de nuevo. Cuando finalmente abrí la puerta, él estaba esperando al otro lado con una mirada terriblemente avergonzada en su rostro y dos bolsas de comida tailandesa del mismo restaurante al que me disponía a llamar.

"Hola," dije mostrándole una rápida y controlada sonrisa.

Me devolvió una sexy sonrisa que encendió la chispa en mi estómago. "Pensé que querrías algo de compañía y traje la cena. Te gusta la tailandesa, ¿verdad?" Preguntó y sostuvo las dos bolsas como evidencia.

Incrédulo, asentí con la cabeza hacia él mientras pasaba junto a mí hacia el apartamento y volví a cerrar la puerta. Dejó las bolsas en la barra y comenzó a sacar los recipientes con gracia y colocarlos sobre la mesa.

Observé mientras sacaba rollitos de primavera, arroz pegajoso, sopa de coco y mi plato favorito de tofu y curry de verduras. Puse mis manos en mis caderas y entrecerré los ojos ante la escena que se desarrollaba frente a mí.

Levantó la vista y notó mi comportamiento y con grandes ojos dijo: "¿Qué? ¿Pasa algo?"

Sentí mis labios torcerse y mi ceño fruncirse tratando de averiguar exactamente cómo abordar esto. "Jungkook, ¿qué te hizo decidir traer comida tailandesa para la cena?"

Estaba ocupado abriendo tapas pero sus manos se detuvieron por un breve momento antes de continuar. "Pensé que te gustaría, sé que no comes carne, así que pensé que sería una buena opción".

Consideré esto por un segundo pero no me desanimé, "¿Sabías que este es mi restaurante favorito?"

Miró hacia arriba, su rostro siempre suave completamente inocente, "¿Lo es?"

La criatura perfectaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora