La criatura perfecta

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JM POV

"Él no contesta", dije, arrojando el teléfono sobre el sofá. Rebotó en el cojín y golpeó a Chanyeol en la pierna. "¿Por qué no lo hace?"

Chanyeol suspiró molesto, pasándose la mano por el pelo corto. "No lo sé, Jimin, ¿porque está luchando contra vampiros y tal vez no tiene tiempo para atender una llamada de su novio?"

Le lancé una mirada asesina y comencé a caminar por los brillantes pisos de madera que se extendían por el vestíbulo de los Jeon. Finalmente me recuperé y dejé de llorar por el aterrador video, quedándome casi insensible después de verlo innumerables veces. Chanyeol explicó que Taehyung estaba retenido en un viejo banco en el centro de la ciudad, en la bóveda. Las cajas de seguridad en la pared y una pequeña placa junto a la puerta le indicaron la ubicación. Desafortunadamente, mi frustración por no poder comunicarme con Jungkook por teléfono me estaba poniendo nervioso nuevamente.

Miré a Chanyeol, quien parecía imperturbable por todo el asunto, y le pregunté: "¿Qué debemos hacer? Tú sabes cómo encontrar a Dawn, no puedo comunicarme con Jungkook y Taehyung necesita nuestra ayuda".

"Sé una cosa", dijo levantando la vista de la pantalla de la computadora donde estaba viendo el video que Dawn había enviado nuevamente, "no hay nada que puedas hacer para ayudar en esta situación, así que es mejor que te relajes por un tiempo".

Me dejé caer en el cómodo sillón frente a él y suspiré. Tenía toda la razón. No había nada que pudiera hacer. Jungkook me mataría si asomara un dedo del pie fuera de esta puerta sin él. Además, no tenía ningún interés en encontrarme cara a cara con Dawn en la vida real después de mis anteriores encuentros con vampiros malvados. Dos veces fueron suficiente. Además, Hyuna daba miedo, pero el video me había mostrado que Dawn era aterrador.

Tomando una de las revistas de la mesa auxiliar, comencé a hojearla, hojeando sin descanso las páginas de cocinas, áticos ampliados y baños de estilo de época. Como no me interesaba This Old House , la tiré hacia atrás, esparciendo la pila organizada de revistas similares sobre la mesa.

"Será mejor que guardes esas". Chanyeol advirtió, su voz profunda rebotando en el techo abovedado. "Las cosas en esta casa están muy 'en su lugar'. No me gustaría ser el que lo arruinó".

Fruncí el ceño, pero comencé a arreglar metódicamente las revistas antes de que las tirara. Mi corazón casi se rompe cuando me di cuenta de que estaban en orden cronológico por mes y me recordó a Jungkook y sus ridículas tendencias obsesivas compulsivas. "Bueno, al menos no es el único", murmuré por lo bajo.

"¿No es el único qué?" preguntó Chanyeol desde el sofá. ¿No necesitaba usar el baño o algo así?

Levanté una ceja en su dirección mientras me movía por la habitación y comencé a mirar a través de la fila de libros que se alineaban en los estantes cerca de la chimenea para distraerme. "Genial. También tienes una súper audición". Irritado repentinamente por mi aparente falta de superpoderes, y sintiéndome cada vez más estresado por el hecho de que mi teléfono no había sonado, decidí cambiar de tema. "¿Qué están haciendo tus lobos ahora?"

Chanyeol estiró las piernas frente a él y colocó las manos detrás de la cabeza. "Están corriendo por el bosque. Tus chupasangres estaban siguiendo un rastro específico. Mi manada está patrullando, porque nuestro trabajo es mantener a nuestra gente a salvo". Explicó, y luego me dio una sonrisa lenta y brillante, "Solo expandimos nuestro territorio para incluirte".

Sintiéndome desagradecido, le ofrecí una sonrisa apreciativa a cambio y dije en voz baja: "Gracias. Habrías tenido noticias de ellos si algo..."

Nunca terminé mi oración. Chanyeol saltó del asiento, el sofá se golpeó contra la pared con fuerza. Mi mano voló a mi boca con sorpresa mientras jadeaba en estado de shock. En cuestión de segundos, Chanyeol ya no era Chanyeol, sino que se había transformado, en el aire, en una masa animal peluda y rojiza, que saltó por la habitación y se estrelló contra la sólida puerta de cristal. Mis manos se movieron a mis oídos mientras el sonido de la cascada de vidrio caía sobre los pisos duros. Después del estruendo, hubo, por un momento, un silencio inquietante, el único sonido en la habitación era la respiración pesada y la suave brisa en los árboles que revoloteaban a través de la puerta ahora abierta.