❝ She was sunshine, I was midnight rain ❞
¿Haz hecho algo que crees es lo correcto, pero después te das cuenta de que cometiste un error? ¿Que ya es tarde y no puedes echar marcha atrás?
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CAPÍTULO TREINTA Y OCHO
Oxford, Reino Unido.
En cuanto el jet comenzó a aterrizar, Noah se abrazó al neerlandés, ya que era lo que mas le daba miedo de cuando volaban y los tres lo sabían.
Apenas bajaron, Asia le sonrió a Aleix al ver que era él quien había sido enviado para recogerlos. Noah corrió por la nieve a saludarlo, una vez estuvo en el piso, mientras Max ayudaba a bajar a Asia.
En cuanto bajaron, la castaña saludó a su guardaespaldas y amigo, mientras Max lo saludó con un choque de puños. Le había cogido cariño después de que ayudara a la británica a llegar a tiempo.
— Señorita Russell, señor Max y joven Verstappen, un gusto verlos de nuevo.— sonrió revolviendo el cabello de Noah.
El neerlandés hizo una mueca ante el "señor"— Uy, te lo paso por que me caes bien.
Los cuatro subieron a la camioneta, debido al frío y el italiano se giró a verla, esperando la indicación.
— A casa de mis padres, por favor— pidió la británica y está asintió.
En cuanto el camino comenzó, Noah se pego a la ventana, observando cómo los copos de nieve caían. Le gustaba mucho el clima de Mónaco, el sol, la playa y todo aquello, pero su corazón siempre estaría con la nieve en la que había crecido.
Max miro a Asia y le quitó el teléfono al ver que estaba hablando con Ellie sobre cosas que tenía que hacer con Versace en la Fashion Week y este negó.
— Todo el vuelo y la mitad de ayer estuviste hablando con Ellie— el neerlandés entrelazó su mano con la de ella, al ver que dejo extendida la mano en busca de su teléfono.— Son vacaciones y siendo totalmente honesto— se acercó a ella.— El tiempo que no estes vigilando a Noah, quiero que tu atención sea mía— le acomodó el cabello detrás de la oreja.
