28.

412 95 2
                                    

—Entonces... ¿Sí te gusta Cristian?

Heungmin asintió, totalmente ruborizado.

Sebastian aplaudió con emoción, sonriendo ampliamente.

—¡Lo sabía! ¡Lo sabía!

El coreano frunció el ceño.

—¿Qué? ¿Creías que no se notaba?

Heungmin infló sus mejillas con frustración.

—Aww... —Sebas colocó una mano en el hombro del pálido—. No sos el único, Sonny, a ese boludo también le gustas.

El pálido negó.

—¿Comó qué no? Creía que eras mudo, no ciego.

El chiste del mayor no le causó ni una pizca de gracia al surcoreano.

—Bien, lo siento —se disculpó el castaño—. Pero posta, Heungmin... ¿No te diste cuenta que él siente lo mismo?

El menor tardo unos segundos en tomar su cuaderno para responder.

"No quiero ilusionarme"

—No es una ilusión, Heung, es real.

"Llevo mucho tiempo enamorado, Sebastian. ¿Por qué tendría que decírselo ahora?"

—Porque te lo chapaste, Son. Y a vos te gusto, a él también... Y ambos quieren que pase de nuevo.

El chico pálido no dijo nada, fijando su vista al suelo.

—Che, te lo voy a repetir de nuevo. Si llevas tanto tiempo enamorado y lo besaste ahora... ¿Por qué no lo besaste antes? O después... ¿Por qué ahora?

Heungmin lo miro y supo que había perdido esa conversación, el chico en la silla de ruedas tenía razón.

—Tal como lo chapaste ahora, podes decirle lo que sentís, ahora.

Mute › Cutison. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora