¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
╰───────♡────────╮
Nada en la vida de Twilight fue sencilla desde que nació en el imperio de cristal, decir también que su vida fue un horrible martirio es mentira comparada a cómo fue su vida antes de ser parte de la servidumbre del castillo de cristal.
Antes de que todo el imperio cayera ante los cascos de ese oscuro semental.
Su familia y ella vivían en la parte agrícola de ese hermoso reino de cristal, lo cual a juzgar a cómo era de brillante hasta el mismo suelo donde pisaban, parecía casi imposible que un reino tan pulcro tuviera dicha área un poco alejada del pueblo y que hasta la tierra era de cristal, pero si existía, pero bajo la fachada que los ponis de cristal portaban en sus pelaje al estar contentos.
La pobreza del imperio no era mucha, más ese pequeño porcentaje que existía era feliz, no había que mentir, pero había otros que no eran tan felices a decir verdad. Twilight desde que era una potranca fue criada bajo una familia cariñosa, un hermano mayor sobre protector y una mejor amiga que conocía desde muy chica, y desde esa misma edad ayudaba a sus padres y hermanos en el sembradillo de los vegetales cristalinos del reino, mucho más en el trigo cristal que usaban en la panadería de su padre para hacer pan, Twilight amana ayudar a su madre a prepararlo y a su padre a encender el horno para hornearlo, mientras que su hermano salia a buscar madera para lo mismo, la amiga de Twilight la cual su nombre era Radiant Hope, vendía en ocasiones pan en un carrito junto a ella cuando dejo de ser una potranca, además de que la venta del mismo era muy cotizada, en especial los pays de moras de cristal, la especialidad de Twilight.
Desde allí su vida fue tranquila, pero había algo que no se le tenía permitido hacer, y era ir a la escuela de magia, a pesar de que la panaderia era un éxito, sus padres negaron la oportunidad de Twilight de asistir a una ya que ellos pensaban que no era necesario que asistiera ya que desde pequeña se le enseño cada valor y un poco de magia en el proceso, más específicamente el hechizo de la levitación, también el como hornear pan y como comportarse ante un cliente, tratarlos con respeto y no ser grosera. A pesar de eso, ella de verdad soñaba con asistir a una, pero eso quedó en solo eso, un sueño, pero no se podía quejar, ya que se distraía con sus padres en la panadería o leyendo algún libro de magia en la biblioteca publica.
Su hermano por otro lado, desde que ella dejo de ser una niña, el joven semental les pidió a sus padres permiso para entrenar en el castillo para volverse un guardia del imperio, ya que según él ese era su sueño desde que uno le salvó la vida de caer por un risco cuando fue de excursión siendo un potrillo, sus padres al principio se negaron pero se dieron cuenta que el joven poni se negaba a abandonar ese sueño, así que para que su hijo no les guardara resentimiento, le permitieron hacer su meta realidad y ese mismo día el joven se enlisto en la guardia para iniciar con su entrenamiento.
