Ese tipo de chica [Freenbecky]

Capítulo 04

—¿Qué carajos? —Nam parece tanto sorprendida como asqueada.

Camino hacia la habitación de Becky con el plato sucio em la mano, Nam va llegando y tengo la mala suerte de que me atrapa justo cuando lo hago. No quiero parecer demasiado infantil, pero esto es necesario.

—Es de Becky, sé que lo hace para molestarme y no dejaré que se salga con la suya.

Nam rueda los ojos y yo me encojo de hombros.

—¿Y qué pretendes exactamente Freen?

—Se lo dejaré en su cama —Nam abre los ojos como platos y se lleva una mano al rostro.

—Freen ¿acaso tienes diez años? —trata de reprenderme.

—Escucha, sé que lo hace a propósito, y quiero darle una lección.

—Realmente creo que estoy más preocupada por lo que ella pueda hacerte —dice dubitativa.

Trato de que ese comentario no me ofenda.

—¡Pues que se atreva! —Le digo a Nam convencida, aunque realmente su comentario me ha puesto a pensar.

La verdad no sé si estoy más molesta porque a Becky le parece gracioso provocarme, o si realmente me molesta que deje los platos sucios en la mesa.

Lleva una semana aquí, y realmente parece que solo se burla de mí. Meneándose por ahí con más contoneo del que necesita, con más dulzura en su voz de la necesaria. Para mí era una señal clara, pero ¿qué obtengo cuando intento un acercamiento? Una cachetada y múltiples improperios.

Estúpida Becky.

—Escucha Freen, te dije que te comportaras, esto es...

—¡Lo sé!, pero escucha, hace días vi que dejó un par de trastos sucios en la tarja, le comenté oye, tal vez deberías lavarlos, ya sabes, como una regla de convivencia, ¡y que me encuentro! Mira —digo señalando el plato con restos de comida y servilletas usadas—. Es obvio que lo hizo adrede, solo para molestarme, desde ese día cada vez que salgo a comer esta así la cocina. ¡Sucia!

Y no es broma, no puedo decirle que ha estado jugando con fuego al provocarme para luego ignorarme, y sé que el comentario que le hice no se lo tomó bien. Probablemente lo dije más brusco de como se lo comento a Nam. ¡Pero aun así!

Nam parece darse por vencida conmigo.

—Solo te recuerdo que no se puede ir, deberías tratar de llevarte bien con ella, en vez de hacer estas tonterías Sarocha.

Debería. Si ella se dejara yo podría hacerla feliz. Más de lo que piensa.

Pero la maldita chica solo quiere sacarme de mis casillas. No puedo entender su comportamiento, no hemos convivido mucho, pero ha sido suficiente para darme una idea de su personalidad difícil.

Nam me ignora y yo hago lo mismo, dejo el plato sucio sobre la cama de su habitación y luego me recluyo en mi cuarto. No sé qué espero, pero me siento algo impaciente. Como si realmente quisiera que Becky entrara a mi habitación berreando algo, no sé porque eso me emociona.

No trató de llamar su atención ¿verdad?

Claro que no, solo trato de mostrar un punto, y si ella no quiere cooperar por las buenas debe atenerse a las consecuencias. ¿Qué es lo peor que podría pasar? No va a hacerme nada, solo me gritara, me insultara, probablemente me arroje el plato a la cabeza, pero estoy esperando ese movimiento por lo que no me tomara por sorpresa.

Es solo una niña bonita que cree que por mover el culo todos están a sus pies, pues no Freen Sarocha, oh no.

Admito que me gusta verle el culo, pero si ella va contoneándose por ahí mientras sabe que la observo debería estar dispuesta a dejarme intentar algo, al menos.