Capítulo 27

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Dos días después de la reunión con sus viejos amigos es cuando Mikey decide tener la reunión con los ejecutivos de Bonten para informar finalmente de su marcha fuera del mundo delictivo, queriéndose centrar en tener una vida normal junto a Takemichi y sus amigos más antiguos. No queriendo hacerlo solo, Mikey incluso le pide a Takemichi si puede asistir con él a la reunión, cosa que no duda en aceptar, sin embargo, es Takemichi quien le sugiere hacer algo primero.

Hablar con Sanzu antes para prepararlo para el golpe.

Mikey no había pensado en ello, pero conforme lo va haciendo se da cuenta de que Takemichi tiene razón, es importante decirle antes a Sanzu que va a alejarse de él tras tantos años de amistad y de unión. Algo que no le agradará mucho.

—Mi rey, mi reina. —Saluda Sanzu cuando ambos entran en su habitación, al parecer acaba de despertarse, porque su cabello siempre peinado y perfecto está un poco despeinado, haciendo juego con sus ojos adormilados. —¿Ocurre algo? Pensé que la reunión era por la tarde.

Takemichi, que hace una mueca ante los apodos que Sanzu aún usa pese a su última charla, se sienta en el borde de la enorme cama, una de sus manos tomando la de su amigo, la de su amigo al que no podrá volver a ver cuando Mikey deje de forma oficial Bonten. Mikey se sienta en la silla que hay al lado de la cama, intentando ignorar los celos que florecen en su pecho al ver la mano de Takemichi tomar otra que no es la suya propia o como Sanzu parece sonreír felizmente ante el dulce gesto de Takemichi.

—Por eso estoy aquí, quiero informarte sobre lo que diré en la reunión. —Dice Mikey intentando dejar de pensar en sus celos posesivos, centrándose mejor en Sanzu y en lo confundido que está por ello, pues es algo que Mikey nunca ha hecho antes. —Tras pensarlo, he decidido dejar Bonten y vivir con Takemitchy lejos de todo este mundo, incluso trabajaré junto a Ken-chin.

Takemichi y Mikey observan como Sanzu se congela en su lugar, sus ojos se desenfocan mientras mira un punto fijo en la pared, pareciendo que su mente se ha quedado en blanco tras la decisión de Mikey. Su agarre en la mano de Takemichi se afloja por completo y este mira preocupado a Manjiro, quien también frunce el ceño por la preocupación.

—¿Qué? —Pregunta finalmente Sanzu, su mirada se torna desesperada rápidamente, sale de la cama a trompicones y se arrodilla en el suelo, entre las dos personas que más venera y admira en el mundo, el cual acaba de romperse solo por unas simples palabras. —¿Dejar Bonten? ¡Pero tú eres Bonten, mi rey!

—No hago nada por Bonten, quienes lo mantienen en pie y lo han llevado a lo que es hoy en día habéis sido vosotros, yo solo he sido la imagen, la cual podéis cambiar fácilmente por otro miembro. —Responde Mikey, ya habiéndose preparado estas respuestas para la reunión de la tarde. Aunque ver a Sanzu en el suelo, arrodillado y a punto de llorar le hace sentirse incómodo, no entiende bien porqué, pero le gustaría que el hombre dejase de verse tan triste.

—¡No puedes irte! Mi reina y tú ibais a gobernar el mundo criminal, ibais a ser la imagen perfecta del poder y la gloria de Bonten, el rey y la reina que gobiernan todo el bajo mundo de Japón. —Dice Sanzu, pareciendo un poco desesperado mientras aferra una de sus manos al pantalón de Mikey y la otra al pantalón de Takemichi. —Quédate, gobierna junto a Takemitchy.

—Lo siento, Sanzu. —Dice Mikey, no acostumbrado a disculparse, pero desesperado para que Sanzu deje de verse tan delirante. De reojo, ve a Takemichi soltando con dulzura el puño que se aferra a su pantalón antes de arrodillarse junto a Sanzu, abrazándolo con lágrimas en los ojos, incluso alguna perdida manchando sus mejillas.

—Haruchiyo, yo no podría pertenecer a ese mundo, yo soy un profesor de infantil, me dedico a enseñar a los niños sobre la importancia de las palabras sobre la violencia. El incidente con Kisaki es algo que no quiero volver a vivir. Si me uniese a Bonten, no podría vivir conmigo mismo. —Dice Takemichi con dulzura, el mismo tono que usa con sus niños cuando tienen un ataque o no entienden algo importante. —Manjiro ya no puede seguir en este mundo porque si lo hace, acabará destrozado mentalmente, él necesita alejarse de tanta violencia para poder ser él mismo. No podríamos ser los reyes de Bonten en este universo.

SENSEI TAKEMICHI & BONTEN MIKEYDonde viven las historias. Descúbrelo ahora