El señor Pérez y el señor Hamilton ponen en marcha un matrimonio arreglado para unir a sus empresas.
Ambos padres ponen sus planes en marcha para lograr un resultado beneficioso y para superar los obstaculos que conlleva un matrimonio arreglado.
(In...
Dos botellas de tequilas estaban completamente vacías y la tercera estaba menos de la mitad. Entre pláticas y risas el ambiente se había hecho agradable. La incomodidad había desaparecido.
Lewis estaba en el sillón individual, mientras que Vettel estaba a su derecha y después le seguía Alonso. Carlos estaba a su izquierda, luego le seguía Sergio, que en todo momento no le había dirigido la mirada.
El moreno no podía concentrarse, aunque se la estuviera pasando bien, quería hablar con Sergio y disculparse. No soportaba la indiferencia del mexicano. Alonso y Carlos le habían hablado, pero no Sergio, esperaba que tan siquiera le dijera palabras de desprecio o una simple mirada asesina, no nada.
Por otro lado, Sergio ya estaba borracho, quería levantarse de su lugar e ir a encarar al británico, decirle todos los insultos que se le ocurrieran y al final darle su merecido por haberse portado grosero con él. Realmente había hecho el intento de haber dejado sus diferencias de lado, pero Lewis solo se comportaba como un idiota. Lo mejor que podía hacer era ignorarlo.
Los españoles se habían dado cuenta del estado de su amigo, era el que menos había participado en el rato que habían estado conviviendo, ellos sabían que Sergio era de los que más desmadres hacía en las fiestas.
Alonso era el más feliz ahí, estaba a lado de Sebastián y se la estaba pasando bien, pero tenía la espinita de que su amigo había estado ignorando a su prometido. Así que quería darles una ayudadita.
-Oigan, tengo un juego en mente-. Sugirió Alonso.
Los demás voltearon a verlo curiosos.
-Si no mal recuerdo se llama "Seven Minutes In Heaven", este consiste en que las dos personas seleccionadas pasen siete minutos en un espacio reducido como un clóset-. Explicó.
-Oh, ya se cuál dices, sí lo he escuchado-. Comentó el otro español.
-Yo también-. Agregó Vettel.
Carlos no entendía la sugerencia de su amigo, pues ahí todos eran hombres y no había ni una sola mujer, entonces como si una luz iluminara su cabeza entendió a lo que quería llegar Alonso.
La idea era que Lewis y Checo estuvieran eso siete minutos encerrados solos, para conocerse más, ya que pronto estarían casados.
-Me parece buena idea-. Ayudó Carlos.
-A mí también-. Votó el alemán.
Los tres voltearon a ver a Sergio y a Lewis esperando la confirmación de estos, pero solo se encogieron de hombros para confirmar. No les quedaba de otra más que aceptar.
Alonso tomó una de las botellas vacías y la giró para la selección del primer participante, para sorpresa de todos fue Lewis.
Carlos y Alonso estaban satisfechos del primer resultado, solo esperaban que todo saliera bien en el siguiente.
A Lewis ese juego le parecía ridículo, pero tenía la esperanza de que Sergio pasara sus siete minutos con él y así poder disculparse.
La segunda botella giro, el corazón de los cuatro presentes se detuvo y el resultado fue...
-Alonso-. Dijo un desconcertado Vettel ya que no le hacía nada de gracia que el español pasara siete minutos a solas encerrado con su amigo.
El moreno estaba decepcionado, realmente esperaba que fuera el mexicano.
El corazón de Sergio se había alterado, golpeaba como loco, no sabía por qué, tal vez había querido ser él, el que pasara el tiempo a solas con el británico.
-Hagamos otro intento más para seleccionar a otra pareja-. Sugirió Carlos con desesperación y esperanza de que los siguientes fueran Checo y él, ya que tenía un plan en mente.
-Okey, aquí va la botella una vez más-. -Y el primer seleccionado es...-
-Vettel-. Dijo un poco triste, las cosas no habían salido como quería, pero el plan que Carlos se traía en manos lo sacaría de apuros.
El español giró nuevamente la botella y con cada giro sus corazones saltaban como locos. Y el siguiente seleccionado por fin sería la persona que habían estado esperando.
-¡Oooooh, Chequito bebé, ¡eres tú mi amor!-. Dijo el español feliz a su lado con ese cariño que le tenía. Lo que hizo molestar a una persona en especial.
-Bien, en marcha, no creo que Valtteri se moleste porque usar su casa como si fuese nuestra, aparte ¿ya lo vieron?-.
Señaló gritando el alemán al patio donde estaba la piscina.
-Está nadando en pelotas jajajajjaja-. No pudo evitar reír contagiando a los demás y a algún que otro invitado de los que estaba bailando en la sala que lograron escucharlo.
-Joder tío, no me quitaré esa imagen de mi mente por un tiempo, es como si la tuviera soldada en mis pupilas-. Dijo Carlos traumado, haciendo reír a Sergio que lo había escuchado porque era el más cercano a él.
Lewis aparto su vista de ahí, para voltear a ver a Sergio que se había reído. Y por un momento en toda la noche se sentía feliz de escuchar al mexicano reír. Estaba cayendo.
Hasta aquí les dejo el cap, si tienen dudas no duden en comentar, mientras seguiré escribiendo el siguiente capítulo.
Aquí les dejo estas 😂
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