MATRIMONIO ARREGLADO || CHEWIS

25

Charles se despertó con un brazo pesado sobre su cintura, apenas estaba empezando a recobrar conciencia y los recuerdos de lo que había sucedido en la noche llegaron a su mente, un profundo pánico se apodero de él, con cuidado de no despertar al madrileño se levantó de la cama, sintió un gran dolor en su parte trasera, aun así, buscó sus ropas que estaban esparcidas por el lugar para vestirse rápidamente, borró rastros de que estuvo ahí y salió de la habitación dejando a un español aun dormido.

***

Checo bajó y se encontró a Max y a Charles desayunando café con pan tostado y mermelada.

-Buenos días dormilón -jugueteó Max.

-Buenos días a ambos ¿Cómo amanecieron? -saludó y preguntó divertido por el saludo de Max. -¿Han visto a Carlos? -miró alrededor para ver si podía encontrarlos, pero lo único que vio fue la casa hecha un desastre.

-No -dijeron Charles y Max al unísono.

-Probablemente este durmiendo en alguna habitación -dijo Charles nervioso.

-Hablando del rey de Roma -dijo Max mientras veía a Carlos bajar las escaleras bostezando.

A Charles se le cayó la cuchara ocasionando un ruido y los presentes voltearon a ver curiosos.

-Lo siento -se disculpó más rojo que un tomate.

-No pasa nada -le dijo Max.

-¡Carlos! Te estaba buscando para decirte que ya me tengo que ir.

-¿Tan pronto? ¿Por qué?

-Tengo unos asuntos que atender -respondió levemente ruborizado, tenía que atender unos asuntos llamados "Roscoe y Lewis Hamilton".

-Oh, está bien... no hay problema, yo me quedaré un rato más, cualquier cosa me llamas -imitó un teléfono con su mano y se las llevó al oído.

Sergio asintió, felicitó una vez más a Charles y se despidió para tomar rumbo a la casa de Hamilton.

***

Checo no necesitó tocar el timbre para entrar, Lewis le había dado una copia de su llave para que saliera y entrara cuando él lo quisiera.

-Hola -saludó a Lewis que se encontraba sentado en el sofá leyendo un libro sin inmutarse a apartar la mirada del objeto.

Checo se adentró un poco más y pudo encontrar su maleta a un lado del sofá, su desconcierto se hizo presente ¿Por qué estaba su maleta lista?

-Lewis... ¿Por qu...

-Es todo Checo, ya no te necesito, puedes irte, vete.

-Pero...

-¿Si me escuchaste? -le dijo ahora viéndolo con enojo.

Checo dio un paso para atrás ¿Pero qué carajos se traía Lewis?

-¿Qué pasa? ¿Por qué me hablas así? -preguntó con ganas de llorar ¿Por qué Lewis se estaba comportando de esa manera ¿Él qué había hecho?

-No me pasa nada, solo ya no soporto tenerte cerca.

Eso había sido un golpe para el corazón de Checo.

-Lewis ¿Por qué me dices esto? -le preguntó con ojos llorosos.

Lewis apartó la mirada, si lo seguía viendo y peor aún, en ese estado no iba a soportar y terminaría tomándolo en sus brazos, no podía hacer eso, tenía que alejar al mexicano de él antes de que fuera tarde y saliera lastimado como lo salió con Nico, volver a verlo solo le había traído los recuerdos de su sufrimiento.