Nuestras Historias

Atrapados

Siento la tardanza, pase por un bloqueo culero pero ya esta aqui otra historia mas de su pareja favorita.

Debo aclarar que es la primera vez que me sale un historia tan larga, espero que no les moleste.

Disfruten, los quiero.
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Randy tuvo que espererar a que su madre se quedara dormida para poder salir a escondidas. Se debía encontrar con Howard en media hora a las a fuera de la ciudad. Así que tomo su bicicleta y se dirigió rápido ahí. Al final llego un poco tarde. Vio a Howard junto a otras dos personas más.

-al fin llegas, nos estamos congelando aquí-se notaba enojado mientras se sujetaba bien la bufanda

-perdón, mi mama tardo más en quedarse dormida-se disculpó. Saludo a Julian y a la chica flautista; siempre olvidaba su nombre.
Solo ellos cuatros habían aceptado hacer el tonto reto que Bash había propuesto días antes. Los que logren aguantar toda una noche en la tétrica mansión abandonada serian invitados espaciales en su próxima fiesta.

Antes de entrar revisaron que la cámara y las linternas estuvieran con la carga suficiente para toda la noche. Una vez listos, buscaron por donde entrar.

La mansión se cernía con aires misteriosos. La gente rumoreaba que el dueño sea había vuelto loco, mato a toda su familia, no había ningún dato que validara ese rumor, pero aun así logro mantener a la gente alejados del lugar; además del hecho que su fantasma aún se podía ver merodeando la mansión.

-creo que encontré una entrada-hablo Howard mientras movía unas tablas mostrando una pequeña ventana que daba al sótano. Era del tamaño justo.

-se ve demasiado oscuro-menciono la única chica del grupo

-¿Qué?, ¿tienes miedo?-se rio Randy mientras trataba de abrir la ventana

-cl-claro que no-se cruzó de brazos indignada

-esto es tan emocionante, siempre quise entrar a esta mansión-Julia observaba la mansión con emoción. Él no venía por la recompensa que daría Bash, lo que el deseaba era estar en contacto con algo "paranormal".

Después de un rato se logró abrir, por fortuna había una mesa justo debajo de la ventana haría más fácil entrar-¿Quién entra primero?-Randy miro a los demás pero ninguno dijo algo-bien, yo seré el primero-entro teniendo cuidado de no pisar mal. Una vez a dentro pudo ver que todo se encontraba cubierto de polvo, el aire se sentía un poco pesado por la humedad.

Al notar que no había peligro empezó ayudar a los demás a entrar. Cuando fue el turno de Howard, este por poco se quedaba atascado, pero no lograron meterlo.

-buscare por otro lado, los veo a dentro-se marchó un poco ofendido.

La chica flautista enciende la cámara de una vez para tener ya evidencia de su gran hazaña-huelo mucho a humedad, el polvo no le hará bien a mis alergias-miraba cada repisa del lugar.

Mientras la castaña se quejaba, Julian empezó a levantar cosas con emoción y guardar unas en su mochila que llamaran su atención.

Randy se dirigió la puerta para salir del sótano. Pero pudo sentir que algo le toco el hombro. Se giro rápido. -chicos no intente asustarme-

-¿de qué hablas?-la castaña se encontraba al otro extremo del sótano junto a Julian.

-alguien me toco-trato de sonar tranquilo

-jaja eso no nos asustara-justo cuando dijo eso sonó un fuerte golpe y sin esperarse más salieron corriendo hacia la puerta.

Una vez arriba todos notaron que el lugar estaba más limpio de lo que pensaría que debía verse una casa abandonada. No había casi polvo, los muebles y objetos se encontraban impecables.