Felix despertó con un horrible dolor de cabeza. Se levantó de su cama y se estiró, soltó aire bruscamente y tensó su cuerpo al notar que no podía recordar nada de lo que había pasado la noche anterior.
Sus recuerdos estaban borrosos y aunque hiciera su mayor esfuerzo, simplemente no podía recordar lo que había sucedido.
— ¿Bebí demasiado? — Se preguntó a sí mismo en voz alta y bajó su mirada, pudiendo notar como el piso estaba cubierto de tres dibujos en especial. El primero se trataba de un torso de un hombre desnudo, el segundo era un hombre con sus codos apoyados en la cama, dejando su trasero bien elevado y a la vista del primer espectador. El tercer dibujo también se trataba de un hombre pero con la compañía de otro. En este último dibujo, ambos hombres se encontraban besándose.
Pronto los recuerdos de Felix llegaron a su mente. Un color rojo comenzó a invadir el color de piel del rubio y podía sentir el ardor debido a lo avergonzado que se encontraba en esos momentos. Puso la palma de sus manos en sus cachetes y abrió sus ojos más de lo normal cuando pudo recordar cada detalle.
Si se tratase de una película donde el personaje principal descubre que su orientación sexual no es lo que realmente pensaba, entonces comenzaría a sonar la música dramática de fondo. Era como se sentía Felix, aún no podía creer lo que había hecho, juraba que podía escuchar esa melodía clásica y dramática.
— No. definitivamente eso no fue un beso. — Se negó a creer lo que realmente había hecho la noche anterior, engañándose a sí mismo. — ¿Me... gustan los hombres?, ni siquiera había pensado eso antes. — Todo esto lo estaba diciendo en su cabeza, mientras paseaba de un lugar a otro en su apartamento. Caminaba con desesperación, intentando estar más tranquilo. — Pero, fue sexy. — Sacudió su cabeza y volvió a negar con esta misma. — Estoy perdiendo la cabeza.
El rubio tomó su teléfono celular y marcó al teléfono de ChangBin. Timbró y timbró pero no hubo respuesta. Felix no paraba de pensar en, "¿Ahora como lo veré a la cara?", el hecho de que fuese su asistente de trabajo complicaba aún más la situación.
Por otro lado, Seo se encontraba recostado en el sofá de su amplio y lujoso apartamento. Escuchó como su teléfono vibraba y vió la llamada entrante pero al percatarse de quién se trataba, decidió no contestar.
La noche anterior, después de besar al autor, se dió cuenta de que había una bolsa femenina, llena de maquillaje y pronto cayó en la realidad.
No lo había pensando antes, pero esa noche pudo reflexionar.Chaeyoung había ido al apartamento de Felix mucho antes de que Bin pudiera llegar. Después, el rubio se duchó y eso explicaba la toalla envuelta en sus caderas, su cabello húmedo y su torso desnudo.
Y más tarde, sucedió en beso entre esos dos jovenes.Aunque ese beso había sido demasiado dulce, el rubio había caído rendido ante el cansancio. Seo se retiró del apartamento después de lo sucedido y hasta el día siguiente, aún no podía dejar de pensar qué tal vez había sido un error porque era más probable que Chae y Felix estuvieran en algo.
El teléfono del pelinegro volvió a sonar una vez más. Esta vez, decidió contestar y escuchó la voz grave y áspera de Lee al otro lado de la línea.
— ChangBin, lo siento por lo de anoche. — Dejó ver su inquietud por lo que había pasado.
— No te preocupes. Los dos estábamos borrachos.
— Oh pero de verdad lo lamento.
— Está bien. Nos vemos en el trabajo. — Colgó sin esperar a que el contrario pudiera despedirse. Felix se sentía frustrado ante la situación, aún no podía creerla.
El rubio pasó sus dedos por sus coloridos y carnosos labios, recordado como el otro chico se había dispuesto a besarlo. — A quien engaño. Realmente se sintió bien. — Aseguró él mismo pero también podía sentir confusión debido a la forma tan fría en la que había hablado Bin. — ¿Soy el único que se encuentra inquieto?
Lee comenzaba a pensar que entre ambos, sólo él estaba tomando la situación como algo alarmante.
¿Cómo podrían seguir trabajando con continuidad después de eso?, ni siquiera quería ver la cara de su asistente. Pero aún así, tenía que apurarse y recoger todo aquello que estuviera desordenado.Se apresuró a ordenar su apartamento y tomó una ducha que no duró más diez minutos. Se colocó una camisa holgada de color negro con un pequeño estampado en una esquina superior, unos jeans de mezclilla y unos tenis de bota característicos en color blanco y negro.
Después sólo le quedaba esperar a que Seo llegara a su apartamento a continuar con su trabajo.
No pasó más de media hora cuando el chico había llegado. Su vestimenta era formal como usualmente solía vestir. Su cabello estaba en orden, era todo lo contrario a Lee.— Buenos días, Lee. — Hizo una reverencia y pasó, se quitó sus tenis y los dejó en la entrada.
El rubio no sabía cómo reaccionar ante aquella situación. Ahí estaba el mismísimo Seo ChangBin frente a sus ojos. Es el mismo chico que había estado en la noche anterior con su torso expuesto, el mismo chico que había besado tan bien y ese mismo hombre que había acariciado su cuerpo al momento de besarlo. Ahí estaba su mayor interés por el momento, sin embargo, sentía que no podía hacer nada, pues estaba completamente inmóvil.
El más bajo se acercó a Lee y observó el trabajo que llevaba hecho. Esa última escena no tenía poses eróticas no nada por el estilo. En realidad, se trataba de una escena de relleno.
— Ahora mismo te envío lo que falta por hacer. — Pasó saliva lentamente y su asiente asintió con la cabeza y se retiró a su lugar de trabajo.
«¿ChangBin no siente nada?» Se preguntó Lee al notar como el contrario no parecía alterado como él.
Cada uno tenía distintos pensamientos en ese momento.
Felix sentía que era el único inquieto por lo de la noche anterior y Bin, el seguía con su teoría de qué tal vez Lee estuviera con Chaeyoung.
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Asistente - ChangLix
FanfictionLee Felix es un escritor de tiras cómicas eroticas. Sus historias son increíblemente populares pero han tenido un efecto muy extraño sobre su libido; no puede sentir excitación desde que comenzó a escribir hace dos años. Mientras su trabajo comienz...