02. Trouble in sight

19.9K 1.4K 510
                                    

"Cada vez que intentas olvidar quién soyEstaré allí para recordártelo de nuevoTú me conoces"

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

"Cada vez que intentas olvidar quién soy
Estaré allí para recordártelo de nuevo
Tú me conoces"

5 de enero del 2023
Valencia, España

Narrador Omnisciente

La mañana fresca y soleada de valencia se colaba por las ventanas del jardín a la cocina de los abuelos Monroe en la que resonaban risas.

—¿Victoria, tu le compraste este conjunto de pollito a Amelie?—Juliette ahogo una risa divertida—Anoche lo encontré en mi habitación.

—Es que pensé que se vería bonita.—Victoria murmuró apenada—No note que era para perritos.

El sonido de los pájaros en el jardín hacían que la pequeña niña de ojos verdes observara con curiosidad hacia afuera desde su lugar junto a su tía y madre.

—Son pajaritos hablando.—Victoria le explicó al ver su cara de confusión.

La cocina olía a café recién hecho el cual había preparado Juliette mientras caminaba de una punta a otra ansiosa al esperar una llamada importante desde Italia.

—Juliette, quédate quieta, nos estás mareando.—La voz de su amiga hizo que se detuviera.

—No puedo, Liam aun no me llamo.—Respondió sonriéndole a su pequeña hija—¿Crees que obtendré el trabajo?

Su contraria la miro bebiendo de su taza de café con tranquilidad.

—Estoy segurísima de que conseguirás el puesto, no encontrarán a alguien mejor que tu y sabes que Liam hará lo mejor para ti.

—Eso espero, aunque la idea de volver a vivir en Italia no me convence.—Juliette sonaba preocupada—Imagínate me encuentro con mis papás o esos que alguna vez llamé amigos.

Desde temprano esperaba la llamada de su hermano para saber si la habían aceptado en un puesto de trabajo para una empresa importante de Italia, su hermano estaba allá, por lo que se encargaría del papeleo y lo demás.  Lo hubiera hecho ella, pero sus pequeñas vacaciones en valencia junto a su pequeña hija eran prioridad.

Habían viajado desde Londres donde tenían su departamento para visitar a sus abuelos por dos semanas.

—Amelie...

Juliette observo a su hija que intentaba tirar el plato que reposaba en su trona, cosa que no hizo al escuchar a su mamá, sonrió dulcemente volviendo jugar con su peluche.

—¿Pingui es piquito?—Amelie miro confusa a su peluche de pingüino.

—Si, es chiquito.—Juliette asintió, dándole la razón.

Pero su hija parecía quejarse en voz baja, su madre y su tía rieron por su mueca disgustada al ver como su pingüino no se quedaba parado.

—Eres demasiado inteligente, si hablaras mas me llevarías la contraria siempre.—Juliette se acerco hasta ella y dejando un beso en su mejilla, logrando que sonriera contenta.

DAYLIGHT | CHARLES LECLERCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora