Juliette asiste a una fiesta de cumpleaños sin saber de quién es, conoce a un chico de ojos verdes que estuvo embobado con ella toda la noche, de forma inevitable, la tensión mezclada con el alcohol, los lleva a terminar la fiesta de la mejor manera...
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"Les comento que The Night I Met Her se complementa con el Capítulo 00 y con el extra de Two Strangers. Si quieren leerlos en orden (aunque pueden leer este de forma independiente sin leer los demás), primero lean The Night I Met Her, luego el Capítulo 00 y por último el extra."
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"Te extraño como si fuera la primera noche. Y así sigue, todos los fines de semana, la misma fiesta"
16 de Octubre, 2020. Roma, Italia.
Charles' Pov.
El amor a veces es ciego.
¿Era realmente amor lo que yo sentía por ella?
No podría dar una respuesta, no cuando todos me llamaban loco por querer regresar a su lado. Mamá tampoco había olvidado lanzar un comentario al aire durante el desayuno, su voz resonando en la cocina como un eco de advertencia: no llamar a mi exnovia hoy. Luego Lorenzo vio que miraba la pantalla de mi celular constantemente, el brillo iluminando mis ojos con la esperanza de un mensaje de ella.
No mentiría; esperaba un "Feliz cumpleaños, amor".
—Es mi cumpleaños. ¿Hoy también querrás darme una lección? —Me recosté en el sofá, sintiendo la tela áspera contra mi espalda, ignorando que mamá nos escuchaba desde la cocina.
—No es una lección. Estás por llamarla de vuelta cuando sabes que ella te usó y tú solo quieres volver a verla para no sentirte...
—¿Sentirme cómo? —El silencio inundó la sala, pesado como el aire antes de una tormenta. —¡¿Sentirme cómo, Lorenzo?!
—Miserable. —Apreté mi mandíbula con fuerza al escuchar su respuesta; el sabor amargo de la rabia me llenó la boca.
El ardor en mis ojos se intensificó mientras mi mano temblaba, ya fuera de rabia o nervios, no podía decirlo. Trataba de comprender por qué mi relación no fue buena; lo di todo cada día desde que le pedí ser mi novia. Estaba feliz de presumirla frente a todos, pero ella me veía la cara de estúpido, como si mis sentimientos fueran una broma.
¿Por qué no me amó?
Empezaba a creer que ser "famoso" era una especie de maldición. Parecía que nadie me quería más allá del beneficio que podría ofrecerles al estar a mi lado.
—Me voy a casa; los chicos prepararon una fiesta para esta noche. —Ignoré sus preguntas al levantarme sin mirarlo, sintiendo el peso del silencio a mi alrededor como una manta pesada. —¡Nos vemos mañana, mamá! ¡Gracias por el desayuno de cumpleaños!
Tomé mis llaves de la mesa sin despedirme de nadie más. Pasé las manos por mi cabello mientras caminaba hacia la salida, cada paso resonaba en el suelo como un eco de mis pensamientos.
