debí amarte cuando tuve la oportunidad

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Madison recibe una llamada de Nate y responde alegre por hablar con él.

–hola rubio, ¿cómo estás?–

Nate sonríe y dice.

–hola enana, todo bien... bueno pues en lo que cabe, la casa Montenegro se siente diferente, falta algo... no, realmente falta alguien y su ausencia ya empezó a calarnos a todos hasta los tuétanos, realmente no estamos listos para sentir tu ausencia. –

Nate suspira y juega con unos anillos que lleva puestos, lleva cinco anillos... uno por cada representante de su familia y el sexto anillo lo dejó sobre una carta que Madison le hizo, luego Nate dijo.

– ¿sabes algo Madi? Creo que comenzaré la universidad de manera presencial, alguien me mostro que perder la vida no es no contar con signos vitales... perder la vida es quedarse sin motivos vitales y el que me molesten ya dejo de ser un motivo vital. –

Madison sonríe emocionada y mira la rosa que Nate le regalo, responde con la voz temblorosa.

–no sabes cómo me alegro al escucharte decir eso... veo que valió la pena. –

Nate suelta una risita y dice.

–claro que lo valió, de hecho te debo un viaje a la isla que siempre eh querido visitar de nuevo. –

Madison arque la ceja y dice.

– ¿de qué isla hablas Nate?–

Nate se muerde el labio inferior y dice.

–esa isla esta en las Maldivas... fui cuando era niño pero aun no supero su mar de estrellas, es una de las cosas más bellas que eh visto en mi vida... amaría poder volver con los chicos y contigo. –

Madison sonríe y dice.

–claro que iremos, pero para todo hay tiempo... ¿o no lo ves así?–

Nate sonríe y luego dice.

–es verdad... también es tiempo de que las niñas lindas se vayan a dormir. –

Madison ríe levemente y dice.

–gracias Nate, aunque digo lo mismo eh... hasta mañana. –

Madison corta y se va a dormir, pasan tres horas y la chica comienza a tener pesadillas, su mente la llevo al momento en que Damián y a Louis mientras querían llevársela para lastimarla, Madison temblaba y comenzó a sudar, se despertó asustada despertó asustada y buscando a Liam, una parte de ella lo necesitaba en ese momento, vio a todos lados y se desesperó al no verlo, luego vio a alguien entrar y dijo.

– ¿L-Liam?–

Se encendió la luz y se vio a Tadeo, se acercó rápidamente y abrazo a Madison, le acaricia el cabello para calmarla y dice.

–tranquila nena, y-ya paso, no hay nada a que temerle. –

Pasa un rato y Tadeo logra calmar a Madison, ella se durmió otra vez y Tadeo se fue a su cuarto, Tadeo noto cuanto necesita Madison irse, así que no iba a tratar de impedirlo, pasaron las horas y Madison despertó, tomó sus maletas y se fue al aeropuerto, mientras tanto Asher despertó temprano y tomó sus cosas, tenía todo listo, dijo para sí.

–si no estoy haciendo lo correcto me importa una mierda, hare lo que la beneficie. –

Cuando Asher se estaba yendo vio a Liam, el castaño iba a decir algo pero decidió callar, solo vio a Asher salir con una mochila y dirigirse al auto de su abuelo, Liam lo vio y dijo.

–necesito volver a verla... seguro ella también me necesita, no quiero volver a dejarla sola. –

Mientras tanto Madison llego al aeropuerto y vio a sus amigos ahí con una maleta, fue hacia ellos y dijo.

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