AMORES DE CRISTAL

CAPITULO 5

Mal aún seguía enojada para cuando terminó la cena, aún que se alegro de que Audrey no siguiera en el castillo y en algún momento de la noche se fuera.

Ben había salido a despedir a la reina Ariel y Erick así que Mal se había quedado en la sala pero se había desabrochado las zapatillas.

Lumiere : ¿Necesita algo señora?

Mal alcanzó a ver qué los empleados habían comenzado a quitar todos los adornos.

Mal : dejen todo como está, mañana continúan, ya es tarde para seguir trabajando deben de estar muy cansados y solo que alguien le ayude a la señora Potts a terminar con la cocina.

Lumiere : como diga señora.

Mal : y no me diga señora.

Lumiere : si....se.. por supuesto

Lumiere fue al comedor e hizo lo que Mal le pidió, mando a descansar a todos, lo cual todos aceptaron felices.

Babette : te lo dije, te dije que tarde o temprano lo iba hacer

Lumiere tomo la mano de su esposa y se fueron a la cama, Babette con una sonrisa y Lumiere no queriendo sonreír.

Mal decio subir a su habitación, si Ben quería hablar con ella entonces que la buscará, de todas formas no iba a dar marcha atrás.

Pero Ben no dijo nada por un buen rato cuando entro a la habitación de Mal, cosa que la exasperó

Mal : ¿Qué?

Ben : ¿A qué estás jugando, Mal?

Mal : te parece que estoy jugando

Ben : bueno ciertamente no te logro entender, estas feliz un momento y al otro de la nada te enfadas, no quieres dirigirme la palabra, me cierras la puerta en la cara y luego te pasas toda la noche sonriendo y sosteniendo mi mano.

Mal : pues yo tampoco te entiendo, si no fingo ser tu esposa te enojas pero si lo hago también te enojas, dices que quieres que estamos bien pero a la primera oportunidad que tienes de demostrarme apoyo y comprensión me hechas la culpa a mi, como si yo fuera la que causó todo esto.

Ben : no te culpe de nada, solo te pido que seas empática

Mal : ¿Y yo no necesito empatía?, yo no sé nada de este mundo en que me metiste, no sé cómo actuar, que hacer, nisiquiera se que decir y que no.

Ben : para eso no necesitas hacer sentir mal a las demás personas.

Mal : y no lo hice, dije una verdad, es muy diferente

Ben : pudiste ser un poco más empática

Mal : dime una cosa Ben, soy tu esposa solo de nombre o tengo los derechos que dan por ser tu esposa.

Ben : tus derechos se ganan cuando haces lo que te corresponde.

Mal : bien, pues quiero cumplir con todos mis deberes como esposa

Ben : tu dijiste que ibas hacerte cargo de nada

Mal : pues cambie de opinión.

Ben : esto no es juego Mal.

Mal : eso ya lo se, no me lo tomo a la ligera y lo digo muy enserio, quiero hacerme cargo de todos mi deberes y obligaciones que conlleva ser tu esposa, tu esposa de verdad.

Ben se acercó a Mal. Más de lo que se había acercado desde que se enteró que todo el enamoramiento de Mal era falso.

Una distancia muy corta, tanto que si se inclinaba un poquito podía besarla. Pero no la toco, siquiera por casualidad.