Lev y Yara.

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Regresaron con las justas y una herida de flecha en el hombro de Morgan al teatro. La herida no era profunda, pero la chica se estaba desangrando.

-Acomódenla aquí, rápido-dijo Sarah mientras doblaba un trapo-. Muerde esto, Morgan, te va a doler. Traigan mi mochila, tengo algunos artículos de primeros auxilios.

-¿Ahora eres doctora?-preguntó Jesse.

-Le enseñé un par de cosas-dijo Ellie.

-Guau, no dejas de impresionarme.

-¡Bésense luego, primero sáquenme esta maldita flecha!-gritó Morgan mientras sentía como el dolor recorría todo su cuerpo.

En ese momento, alguien apareció en el lugar. Estuvieron a punto de dispararle, que suerte que se dieron cuenta de quién era.

-¡Amber!-la castaña regañó a su hermana menor-¡¿Qué demonios estás haciendo aquí?!

-¡¿Qué le pasó?!-Amber no le hizo el menor caso a la pregunta de su hermana y corrió hacia ella, tomando su mano-¡¿Qué pasó allá afuera?! ¡Díganme!

-¡Amber, no es el momento!-dijo Tommy mientras regresaba con la mochila-¡Primero deja que Sarah atienda a tu hermana y después te contaremos todo!

Amber se apartó, todavía muy preocupada. Sarah le sacó la flecha a Morgan, quien soltó un leve quejido; luego tomó una botella de alcohol etílico y un trapo limpio.

-Esto te va a arder, no dejes de morder esa cosa en tu boca.

Sarah limpió la herida y Morgan se retorció de dolor. El ardor que sentía, naturalmente, era mil veces peor que la misma flecha. Por suerte, pasó rápido.

-Okey, ahora suturar-dijo Sarah-. Sólo un poco más y terminamos.

Sacó hilo y aguja, esterilizó la aguja y comenzó a coser la herida en el hombro de Morgan. Esta vez ella aguantó un poco más, pero le dolería en la mañana seguramente.

-¿Mejor?

-Mejor-dijo Morgan levantándose-. Gracias por los cuidados, doctora Miller.

No pudieron evitar reír un poco ante la broma.

-Abby y Owen están desaparecidos-dijo Ellie tomando un rifle y una pistola-. Iré por ellos.

-Ellie, es muy...

-¡No empieces, Marlene!-gritó la pelirroja molesta-¡Sé que es peligroso, pero eso nunca nos detuvo antes, a ninguno de nosotros, y no me detendrá ahora!

-Pero...

-Marlene, ¿qué es lo que ves en mí?

Marlene se sorprendió ante esa pregunta.

-¿De qué hablas?

-Cada vez que me miras, ¿qué ves en mí?-insistió Ellie-¿A la niña con la que jugabas fútbol al atardecer junto a Sarah? ¿A la adolescente a la que ayudaste a elegir su ropa para su primera cita? Abre los ojos, yo ya no soy ninguna de las dos. Deja de vivir en el pasado. Puedo hacer las cosas sola, no necesito que me cuides todo el tiempo.

Marlene se quedó callada, analizando esas palabras.

-Entiendo que quieras protegerme desde la promesa que le hiciste a mi madre, pero entiende, no tienes que preocuparte por mí siempre. Me enseñaste a cuidarme sola; tú, Sarah, Tommy, todos me han enseñado a valerme por mí misma. Y sé que desde lo que pasó en ese hospital, todo lo que deseas es que me quede quieta y no me ponga en peligro, pero lo único que siempre he querido es ayudar a otros, que mi vida sirva para algo, y no me puedes quitar eso, no te lo permitiré.

The Last of Us: Parte II (Una historia diferente)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora