Capítulo 1

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-Hiro, Tadashi quiere verte.

-Él no está, Cass. Acéptalo.

-Lo acabo de ver... me ha dicho que quiere hablar contig...

-Entonces dile que no.

Su tía se quedó callada, aun con su mano en la puerta. La esperanza en su rostro lo había reemplazado por una de decepción. A Hiro no le importó y siguió girando un tornillo con sus dos dedos, había perdido su herramienta que acostumbraba a usar casi todo el tiempo y eso le ponía de muy mal humor además de las constantes alucinaciones de su tía que le daban una gran sensación que consistía en el nerviosismo y luego por el temor, pero todavía seguía con la esperanza de que Cass terminara con su locura y aceptara de una vez que Tadashi había muerto hace un año y dos semanas. Lo aceptaba, a él también le había costado mucho tratar de dejar de pensar todo el día en Tadashi, de todos modos, era su único hermano y el recuerdo más cercano a sus padres, pero se había ido y ya no podría imaginarse la cara de su padre en la de él, aunque tampoco era que recordara su rostro.

Escuchó unos gritos e inmediatamente supo que era en la calle la cual su ventana entreabierta dejaba a la vista. Dejó las cosas en su escritorio y se levantó esperanzado esperando a que sea lo que él imaginaba. Abrió la ventana y asomó su cabeza afuera, a los segundos sintió el aire empujando su cabello hacia el lado contrario en el que miraba.

Giró la cabeza hasta el lado derecho y ahí observó a Fred junto a un grupo de unos posibles emos arrepentidos. Hiro rodó los ojos, Fred era el único el cual no se había ido de San Fransokyo, juraba haber escuchado a Hans hablar sobre un nuevo miembro en las peleas de robots cuando pasaba al lado de una tienda de comida rápida. Se sorprendió en el momento de haber escuchado eso y demás, porque no sabía que Fred era de esas tipos de cosas y menos de ser capaz de inventar su propio robot, pero luego entendió que ya habían hablado sobre que él solamente serviría como un anfitrión, y en eso estaba de acuerdo.

No le agradó la idea, pero, de todos modos él ya no era parte de todo eso aunque lo extrañaba en cierto punto y le gustara volver en estos tiempos en lo que tenía de vacaciones, porque aún estaban construyendo el Instituto Tecnológico de San Fransokyo, en el que debería de estar yendo en estos momentos.

Hiro volvió a sentarse en su silla pero sin volver su interés en aquel prototipo en el cual no veía futuro.

Se giró sobre la silla y miró toda su habitación. Había cambiado mucho desde la última vez que Tadashi había pisado en este lugar; ahora habían papeles fichados en las paredes al igual que varios intentos de dibujos de ideas que tuvo sobre nuevos proyectos que estaba seguro que los intentaría construir para matar el tiempo en la universidad.

La universidad, aún no sabía su todos sus amigos (que no los veía no más de un mes) volverían a tiempo para ingresar. Él estaba seguro que volverían pero no sabía cuándo y esos eran los motivos por los cuales le entraban dudas de ingresar allí, pero a los minutos de pensarlo se convencía que iría igualmente y tal vez podría hacer más amigos, aunque en todos sus quince años de vida solamente haya hecho cuatro amigos.

Escuchó la puerta abrirse.

-Tadashi dijo que no se irá hasta hablar contigo.-dijo su tía.

-¡ÉL NO ESTÁ, CASS!

La susodicha cerró la puerta. Hiro suspiró y recostó su cabeza en su mano tratando de conservar la calma. Empezaba a sentir ese incómodo dolor en su estómago, el cual se presentaba cuando estaba poniéndose nervioso, cosa que pasaba casi todas las semanas cuando su tía seguía con esas alucinaciones, aunque no estaba seguro de llamar su locura así, hasta no tenía idea si era sano para él seguir llamándola a Cass tía.

Las nueve y media.

Era hora de dormir y él seguía en el salón tratando de terminar esa sopa asquerosa que Cass le había hecho. Ella se había ido a dormir yacía una hora antes de empezar una discución con él. Le había reprochado no querer ver a Tadashi esta tarde, y Hiro le había discutido lo de siempre, cosa que no le costó comprobar al salir de su habitación para comer y ¿adivinen que?...

Tadashi no estaba.

Le dio otro sorbo a la última cucharada de su sopa y rápidamente se alejó de la mesa arrastrando la silla, parándose y dejando la cocina sola con el plato vacío en la mesa.


Nota:

¡Hola! Buano, la idea de la historia es de DAMNATSU (Gracias, genia! <3) y el primer capítulo lo está escrito por ella, así que decidí compartirlo con ustedes.

►Ice

NightmareDonde viven las historias. Descúbrelo ahora