Keep me away.

Capítulo 2.

Harry.

El chico de ojos azules se quedó inmóvil en su lugar como si no hubiera escuchando al profesor. Desvío la mirada de mi y se concentró en desamarrar sus zapatos.

—Tomlinson, estoy hablando con usted.— si su voz de por si ya era fría ahora era intimidante.

El chico volteo los ojos y por fin se digno a mirar al profesor con una pequeña sonrisa condescendiente, lo cual no le agrado en lo absoluto, una vena en la frente le palpitaba.

—Tuve una emergencia personal.— se encogió de hombros restándole importancia.

Su voz era suave y despreocupada, ligera y amigable. Me quede observándolo siendo incapaz de mirar a otro lado.

—¿El primer día de clases?— Tomlinson asintió con la cabeza aumentando su sonrisa.

—Una disculpa profesor no volverá a suceder.

—Eso espero, póngase a hacer estiramientos en silencio, que no se vuelva a repetir.— dijo el profesor alejándose de él.

Tomlinson respiro de alivio y se unió a un par de chicos del fondo, hablando animadamente con ellos. Intente con mucho esfuerzo ignorar la sensación extraña que sentía en el estómago, pero fue en vano. De vez en cuando miraba sobre mi hombro hacia donde él estaba, y sin darme cuenta me le quedaba viendo y cuando él sentía mi mirada y volteaba yo regresaba a mi lugar avergonzado.

El profesor nos hizo hacer una pequeña demostración individual para evaluar nuestra técnica y movimiento. Al llegar mi turno sentí como mi estómago se revolvía de nervios, notaba la mirada de todos sobre mi.

—¿Listo?— preguntó el profesor, asentí con la cabeza, aunque algo en mí sabía que si decía que no le daría igual.

La música comenzó a sonar y junto con ella mi cuerpo comenzó a moverse. No sabía cómo lo hacía pero mis movimientos eran ligeros y torpes. Intente controlar mis piernas pero se me hacía muy complicado. Levante mi mirada un segundo y se conecto con la de Tomlinson que me miraba con curiosidad.

Seguí bailando hasta que la música por fin termino.

El profesor indiferente, hizo pasar al siguiente alumno haciendo que me sonrojara a más no poder.

Al llegar el turno de Tomlinson parecía confiado, y entre más avanzaba la canción más entendía por que. Sus brazos estaban sincronizados con sus piernas, su rostro perfectamente alineado con sus hombros, pero lo que más me impactó fue el sentimiento que salía de él, era puro y sincero.

El bailaba como si estuviera solo, como si él fuera lo único en el mundo. Todo era azul.

Al terminar el profesor se quedó callado unos segundos hasta que por fin hablo.

—Nada mal.

Él sonrió orgulloso, con una gota de sudor bajándole por la cara. Al terminar la clase por fin pude irme a mi dormitorio, me sentía avergonzado de mi baile. Al llegar Niall no estaba lo cual agradecí.

Me di un baño rápido y me metí a las cobijas intentando encontrar calor.

Pensé en el chico de ojos azules, no sabía su nombre y eso me causaba una gran curiosidad, ¿cuál era el nombre de aquel chico orgulloso? Pensé en el hasta quedarme dormido.