Keep me away.

Capítulo 5.

Harry.

Ni siquiera preste atención hacia donde nos dirigíamos, supe que Liam había intentado seguirnos pero Niall lo había detenido diciéndole algo de esperar a que todo se tranquilizara.

Llegamos a una habitación que desconocía, me sentó en la cama y me dejo por ir a buscar algo, no preste mucha atención hasta que sentí algo frío en mi ojo, levante la mirada y era una bolsa de verduras congeladas. Él me miró y me sonrió intentando reconfortarme.

—¿Te duele mucho?

Negué con la cabeza, eso no pareció calmarlo, simplemente asintió con la cabeza y se arrodilló frente a mi.

—Mataré a Zayn en cuanto lo vea.— me hizo sonreír un poco.

—No si Liam lo mata primero.

Sonrió más al ver que respondí. Pero se puso serio luego de unos segundos.

—Harry, ¿que sucedió allí? Temblabas mucho y tartamudeabas, dijiste "detente" y llorabas sin parar. ¿Quieres contarme?

Me quede pálido, trague con nerviosismo, y se me salió una risa sin gracia nerviosa.

—No es nada Louis, solo fue el susto del momento, estoy bien, pero realmente no lo vi venir, es todo.

—¿Seguro?

—Si, gracias por preocuparte pero todo está bien.

—De acuerdo.

No pareció creérselo en absoluto pero el no me presionó. En vez de eso se sentó junto a mi y comencé a inspeccionar el lugar, estaba completamente ordenado, había libros viejos en un escritorio y en una repisa. Hasta que me di cuenta que la estructura era diferente a mi habitación, esta era más grande.

—¿Por qué esta habitación es tan grande?— pregunté mirándolo a los ojos.

Él pareció distraerse un poco pero recuperó la idea rápidamente.

—Porque las habitaciones de segundo año son más grandes. Son más amplias mientras pasas de año.

Me dejo un poco más confundido que al inicio.

—Entonces, ¿tienes amigos de segundo año?— pregunté haciendo una mueca por el dolor.

Él pareció querer partirse de la risa, cerró los ojos un momento intentando controlar su risa.

—Harry, yo soy de segundo año.

Al ver mi cara de sorpresa si que se partió de risa. Yo quede boquiabierto, no parecía de segundo, era tan amable y dulce, los chicos que había conocido de segundo año eran unos cretinos.

—Pensé que lo sabías.— dijo parando de reír pero manteniendo su sonrisa divertida.

—Te juro que no.

—Pues lo sabes ahora, los de segundo tenemos más privilegios. Otra razón para que no te alejes de mi.— me guiñó un ojo.

Mis mejillas volvieron a ponerse rojas.

—No entiendo porque piensas que me alejaré de ti, ya eres mi amigo Louis y no necesito de tus privilegios para quedarme tonto.