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- ¿En serio vas a quedarte allí?

SoonYoung se masajeaba el cuello mientras meneaba la cabeza de un lado a otro.

Eran los únicos en el pasillo. Lo cual no sería tan raro si no estuvieran custodiando la habitación de los Jeon como si fuesen guardaespaldas.

- Escuché a Lee hablar con el director - explicó emocionado - Dijeron que Jeonghan vendría hoy, tienen una sesión de fotos antes de ello por lo que vendrán directamente, no quieren ser vistos por la prensa así que entrarán por una puerta de servicio, no sé cuál de todas pero es mejor esperarlos aquí,  así que no me moveré de este lugar.

Soon lo miró con algo de miedo.

- ¿Por qué me ves de ese modo?

- ¿Eres un paciente o de la maldita CIA?

- ¿Eh?

- ¿Dónde demonios escuchaste todo eso?

- Por ahí.

Ambos miraron al principio del pasillo.

- No eres el único que recibió la noticia...

Seungcheol caminaba hasta ellos con una sonrisa mal disimulada. Los vió frente a la habitación y sus pasos fueron directo a ellos. No parecía muy feliz. La felicidad escapó de su rostro.

- Te dije que no debíamos quedarnos aquí - susurró - Nos van a correr.

- Que lo intente.

- Y una mierda, él tiene derecho de hacerlo, es su doctor, ¡Son celebridades, Jihoon!

- El presidente Jeon es un paciente, igual que tú. Al menos en eso somos iguales...

Seungcheol no se tomó la molestia de ser precisamente amable.

- ¿Se les ofrece algo? - preguntó a secas.

SoonYoung sólo quería hacerse pasar por una decoración más del pasillo. Ojalá Jihoon no fuera tan imprudente y bocón.

- Esperamos a alguien.

- Espero que no sea al paciente de esta habitación.

- De hecho, sí.

- Ya nos íbamos de todos modos - SoonYoung tomó la mano de su novio y tiró de él hacia su propia habitación.

- Yo no me voy - aclaró sin retroceder un sólo paso.

- ¡Jihoon!

- Tendré que pedirles que se retiren. Ésta habitación no está abierta a visitas.

¿Por qué tenía que ser tan odioso? Mingyu y Chan no habían tenido problemas con ello. Y según su percepción, la convivencia entre pacientes era buena, estaba bien saber que no eran los únicos pasando por un mal momento en sus vidas, podrían encontrar consuelo y esperanza en otros como ellos, lo mismo para los familiares.

Muchas veces se hablaba de lo difícil que era lidiar con el cáncer, pero poco se conversaba sobre la dificultad de ser un familiar y llevar el acompañamiento con un paciente.

Jihoon podría entender a Jeonghan. Y Jeonghan podría imaginar por lo que pasaba Jihoon.

- No somos visitas - lo encaró - Estamos en el proyecto Hope.

- Entonces saben que ésta no es su habitación.

- Pero sí sé de quién es - sonrió sin sentirse un poco intimidado.

- No puedo permitir que los molesten. Y si no se van de aquí, llamaré a seguridad y los denunciaré por acoso.

Jihoon titubeó en ese momento.

US AGAIN (WONHAN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora