33 (Final)

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Cuando Minghao y Jun entraron en la casa de los Jeon. Todo estaba en silencio, tardaron varios minutos antes de encontrarlos. Y fue la imagen más desgarradora que hubieran visto de sus mejores amigos. Ambos estaban en la tina, desnudos, bajo el agua helada. Jeonghan abrazaba con fuerza el cuerpo inerte de Wonwoo.

Jun fue el primero en reaccionar y tomar el pulso de Wonwoo, aunque ya sabía que no lo encontraría. Intentó despertar a Jeonghan con bofetadas, una más fuerte que la anterior, pero nada lograba despertarlo. Temieron lo peor. Minghao buscó entre su tocador de baño y encontró un frasco con pastillas para dormir. Estaba vacío y mal cerrado. No tardó en llamar a una ambulancia.

Habían perdido a Wonwoo... Pero no estaban dispuestos a perderlo a él también. No de ese modo.

⌛⌛⌛

Cuando Jeonghan despertó, encontró el lugar especialmente familiar. Ya era casi de noche. Estaba en la misma habitación que meses atrás habían dejado. La crueldad de volver a ese lugar, era casi inhumana.

- ¿Cómo te sientes? - preguntó esa voz triste.

Pero Jeonghan no respondió. Comenzó a llorar hecho un ovillo en la cama. Las pastillas no habían sido suficientes. Wonwoo se había ido, y él estaba de vuelta en ese maldito hospital.

- Lamento tu pérdida.

- ¿Dónde están Jun y Minghao? - dijo sin fuerzas.

- Haciendo los arreglos. Para el funeral...

Jeonghan se levantó de inmediato, se sintió mareado. La cabeza y toda la habitación le daban vueltas.

- No te puedes ir... No ahora...

- No vas a decirme qué hacer, Mingyu.

El castaño lo tomó de las muñecas ayudándolo a encontrar equilibrio. Lo miró directamente a los ojos. Y sintió que el corazón se le partía. Ese no era el Jeonghan que había conocido, ese no era el Jeonghan que se había casado con Wonwoo. El brillo en sus ojos se había ido por completo, como si su luz interior se hubiera apagado.

Intentaba entender con todas sus fuerzas la situación que atravesaba, su esposo había muerto en sus brazos, mucho antes de lo que tenían previsto. Lo sostuvo durante horas sin vida, seguramente las peores en todos sus años. Su dolor era tan grande, tan insoportable, que intentó seguirlo hasta la muerte. Y ahora él estaba ahí, y Wonwoo ya se había adelantado lo suficiente como para seguirlo.

- Sé que no tengo idea sobre cómo te sientes... - dijo sentándolo en la camilla - Sólo quiero ayudar...

Jeonghan lo miró con los ojos llorosos.

- Tráelo de vuelta... - suplicó con un gesto de dolor - Eso me ayudaría mucho...

- Jeonghan...

El rubio se sostuvo el rostro con ambas manos y una vez más, lloró sin control. A Mingyu se le partía el alma al verlo y escucharlo. Sentía envidia de Jeonghan porque al menos él podía llorarlo de ese modo, pero él no se sentía con el derecho de hacerlo. ¿Quién era él para llorar su muerte? Nadie. Sólo el médico mediocre que no pudo hacer algo para salvarlo. Ni siquiera para retenerlo en el hospital.

- No lo soporto... - gimió - Siento que no puedo respirar... - Se sostuvo el pecho con una mueca de dolor.

Mingyu se sentó a su lado y acarició su espalda.

US AGAIN (WONHAN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora